Leily Fernández, una emprendedora que trabaja desde hace casi 10 años en el Mercado Altos de Jalisco, ubicado en la parroquia Coquivacoa, de Maracaibo, denunció este martes 11 de marzo una serie de impedimentos por parte de Polimaracaibo para reconstruir en los dos locales que tiene adjudicados a pesar de que, afirma, tiene los permisos necesarios.
Desde el pasado 25 de febrero las obras de reconstrucción se paralizaron por una orden de las autoridades municipales, declaró al Diario La Verdad la vendedora de desayunos.
Los quioscos, identificados como 92 y 93, se encuentran en la parte exterior del recinto comercial y, precisó, tienen más de 30 años formando parte del mercado.
Fernández explicó que en mayo de 2024 le solicitó al alcalde Rafael Ramírez Colina un permiso para reconstruir en los referidos locales. “Me dijo que esperara y que me enviaría el permiso con Yohan Araujo, el presidente de Corpoalimentos. En enero me llegó, ahí es donde fue que empezamos a reconstruir”.
El proceso avanzó hasta que el 25 de febrero funcionarios de la Policía municipal pidieron detener la obra bajo el argumento de que carecía de los permisos necesarios.
“Los albañiles pararon la construcción de inmediato. Me dijeron que tenía que presentarme a las 5.00 de la tarde en la estación que está por la Circunvalación 1”, relató. Señaló que nunca le dijeron quién habría introducido la denuncia.
Controversia por el uso de concreto
La emprendedora aseguró que cuenta con los pagos al día y todos los documentos necesarios, pero Polimaracaibo argumenta que no puede construir con concreto porque la zona es clasificada como “área verde”, en una plaza.
A pesar de esto, Fernández aseveró que el presidente de Corpoalimentos y Reidy Duarte, coordinador del mercado, también afirman que los quioscos han estado allí desde mucho antes de la creación de la plaza y no perjudican su entorno.
“Esos quioscos ya están deteriorados, ahí vendemos desayunos, entonces yo vendía los refrescos en vasos con hielo, porque si yo meto un freezer o una cavita, ahí esas latas las abren y se las llevan”, explicó la denunciante.
Agregó que, como emprendedora, busca dignificar su lugar de trabajo, algo que, en su opinión, también beneficia a la fachada del Mercado Altos de Jalisco.
A pesar de buscar orientación en Catastro y tras ser remitida a la Oficina Municipal de Planificación Urbana (Ompu), no ha recibido respuestas claras o posibles soluciones.
“Me dijeron que necesito presentar una adjudicación antigua que compruebe los años de los quioscos, pero ellos tampoco vienen a averiguar cuántos años tienen los quioscos, si me conocen, si no me conocen “, comentó.
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