Las víctimas presentaban varias heridas por arma de fuego y estaba uno a un costado del otro
Los cadáveres de Ríchard Gómez (38) y su compadre Ángel Antonio Lujan (28) ingresaron ayer a la morgue forense de Maracaibo. Entre sus pertenencias no se encontraron documentos ni objetos de valor. Sus parientes alegaron que viajaron desde Ciudad Ojeda para negociar un vehículo. Los buscaban desde el pasado sábado.
A los muertos los encontraron los moradores del sector Sabana Perdida, municipio La Cañada de Urdaneta. Los encontraron en una zona enlodada por las lluvias. Muchos se acercaron hasta las víctimas, los miraron, intentaron identificarlos, pero todos los residentes concluyeron que no pertenecían a ninguna de las barriadas aledañas.
Los cuerpos de seguridad atendieron ayer, a las 12.00 del mediodía, la denuncia. Las víctimas presentaban varias heridas por arma de fuego y estaba uno a un costado del otro. La escena estuvo resguardada por dos horas por los funcionarios de la Policía regional hasta la llegada de los sabuesos de la Policía científica, quienes realizaron las experticias y ordenaron el traslado de los cuerpos.