La Primera Guerra Mundial duró cuatro años, la Segunda seis y la “Económica” lleva 10 años; mientras que los 15 motores inventados para combatirla están en una chivera porque sin dólares no prendieron. La emergencia económica, el control de cambio, la inamovilidad laboral que normalmente son medidas transitorias aquí son perennes
El que se creía eterno nos arrastró al primitivismo más obcecado y nos colocó en plena Edad Media con lo del conuco, el trueque, las monedas comunales (y ahora la criptomoneda), que por supuesto, desaparecieron junto a los cultivos hidropónicos, los gallineros verticales, el crecimiento endógeno, el caviar ruso, la ruta de la empanada, los helados cubanos, los fundos zamoranos, los saraos, saraitos, mercalitos y Pudreval. No pegaron una, pero no importa, para eso está el Ministerio de la Suprema Felicidad del Pueblo.
En este rico país petrolero, el dinero físico es tan difícil de conseguir como la comida, las medicinas y los artículos de primera necesidad. Mientras tanto, el BCV le da a la maquinita de hacer dinero inorgánico que lo que hace es elevar la inflación, lo que nos ha llevado a estar entre los 10 primeros lugares de inflación más alta del mundo, durante los últimos 15 años, liderando los últimos tres. Los avisos de “Compro billetes de 100 mil bolívares” o “vendo efectivo al 25 por ciento” se leen abiertamente en los canales electrónicos.
Un país donde la oposición siendo mayoría pierde las elecciones y gana el partido de un presidente que tiene un 80 por ciento de rechazo; donde el salario mínimo cubre un sólo día de las necesidades básicas del hogar y donde sin embargo, una caja de huevos cuesta menos que los 35 mil litros de gasolina de una gandola.
El parque automotor público y privado inexistente por falta de repuestos, aceite de motor y gasolina. Único país en el mundo con un presidente vivo sin partida de nacimiento y otro muerto sin partida de defunción. También somos el único país que cuando se entra a una panadería se pregunta ¿hay pan?, y a un banco ¿hay dinero? CANTV sin oficinas de pago, sin papel para los recibos e increíblemente, sin línea telefónica. ¡Dios!.
La Primera Guerra Mundial duró cuatro años, la Segunda seis y la “Económica” lleva 10 años; mientras que los 15 motores inventados para combatirla están en una chivera porque sin dólares no prendieron. La emergencia económica, el control de cambio, la inamovilidad laboral que normalmente son medidas transitorias aquí son perennes. Dice el dicho “el que a los 20 años no fue comunista sabrosón no tiene corazón, pero el que a los 40 lo sigue siendo, simplemente no tiene cerebro”. Que oiga quien tiene oídos…
diciembre 7, 2024
