Delincuentes se metieron a la vivienda de los Martínez. Robaron joyas, celulares y electrodomésticos. Antes de salir mataron a Rosa Tibisay Hernández Cumare (49)
El ruido que hacían cinco delincuentes alarmaron a Rosa Tibisay Hernández Cumare (49) y a su esposo. Al salir de sus habitaciones los apuntaron con pistolas, los amarraron en una habitación mientras robaban. A la mujer la mataron de un disparo al evitar que se llevaran secuestrada a su hija de crianza, de cinco años.
Saltaron la cerca de ciclón, aflojaron los bombillos de los alrededores y abrieron la puerta principal. "El sonido nos despertó", contó César Martínez esposo de la víctima. Al salir ya los cinco vándalos estaban adentro y los obligaron a permanecer en silencio.
Los sentaron en una cama, los amarraron uno a uno y les pidieron el dinero que tuviesen en la vivienda, mientras que otros revisaban todo. César entregó todo el dinero que reunió su negocio, una venta de licores, en el fin de semana.
Tomaron joyas, celulares y electrodomésticos, pero para los malandros era insuficiente. Golpearon a Martínez y a sus hijos. Antes de huir, uno de los ladrones le arrebató a Rosa, de sus brazos, a su hija de crianza para exigir más dinero por su rescate. Rosa se paró y trató evitar que se la llevaran y le dispararon en el hombro y huyeron en un carro que los esperaba afuera.
Un hijo se paró, agarró un celular que olvidaron los vándalos y llamó a otros parientes. Al llegar llevaron a todos a una clínica, donde murió Rosa. A su esposo le suturaron heridas en el rostro en el Hospital de Cabimas.
La Policía científica recabaron evidencias en la vivienda y entrevistaron a cada una de las víctimas para dar con el paradero de los responsables. Rosa era la octava de 18 hermanos.