En el municipio San Francisco “no comen bien”. La comunidad se queja de que los mercales no están funcionando y que las fallas de los productos se presentan desde el mes de octubre de 2015
Los consumidores de San Francisco están “claros de que no comen bien”. Helen Atencio, ama de casa, recuerda el llanto de la semana pasada “porque no alcanzó el dinero” para comprar todos los alimentos. Asegura que “no hay consuelo” al recordar que ni con la red de Mercados de Alimentos tiene oportunidad de abastecerse. Y es que “los mercales no están funcionando en ningún sector de San Francisco”.
Desde octubre de 2015 comenzaron a fallar en las ventas de productos, resalta Beatriz Márquez, compradora. En los sectores como La Polar, 24 de Julio, El Soler, El Samán, Los Samanes, El Caujaro, Fundabarrios y San Felipe “ni los mercalitos (bodegueros) están surtiendo. Están paralizados”. Por eso las familias deben ir “obligado a los supermercados a buscar comida. Por eso hay tantas colas”.
Para Atencio era una solución tener cerca los módulos de Mercal vendiendo productos a bajos precios. Ahora con “la crisis que hay no están abiertos. Si acaso una vez a la semana venden”, lamenta, mientras suma cinco horas en la cola del automercado a la espera de adquirir leche en polvo enriquecida a mil 200 bolívares.
Irene Chourio, ama de casa y “‘bachaquera’ por necesidad”, asegura que la distribución de comida “es un fraude. Los consejos comunales no venden los productos a todas las familias, los mercales desaparecieron, la bolsas (de casa por casa) no llegan a mi barrio: 1 de Marzo. Este país es un desastre”, critica.
Jonny Fernández, comerciante, reclama que la misión Alimentación se perdió en los barrios populares. De visita en San Francisco, señala que en Caracas “la situación es igual. La situación es difícil. No hay comida”.
Beatriz Márquez manifiesta que “la política del Gobierno de llevar comida casa por casa cambiando a Mercal, es una de las peores estrategias que utilizaron”. Reprocha que la Alcaldía de San Francisco participe en el desvío de alimentos de los supermercados a centros de redistribución ubicados en Maracaibo.