Las autoridades colombianas detuvieron a 33 personas en Bogotá por nuevos saqueos a locales comerciales en el sur de la ciudad, mientras que militares y agentes siguen desplegados en la zona para garantizar la seguridad de los establecimientos, informaron hoy fuentes policiales
El subcomandante de la Policía de Bogotá, general Ricardo Alarcón, dijo a periodistas que hay “33 capturados, con un número importante de menores de edad” por los desmanes ocurridos anoche en el sur de la ciudad y están siendo llevadas ante los jueces por hurto y los daños ocasionados a los establecimientos.
Los saqueos comenzaron el martes contra varios locales comerciales propiedad de presuntos testaferros de la ya desmovilizada guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) e investigados por la Fiscalía.
No obstante, la situación se ha extendido y los atracos de anoche fueron cometidos contra tiendas de zapatos y de electrodomésticos que no tienen relación alguna con los almacenes presuntamente relacionados con las FARC.
En videos difundidos por redes sociales se ve como algunas personas irrumpen en los locales cerrados rompiendo sus puertas y ventanas.
“La Policía Nacional diseñó un plan que va a garantizar la seguridad de los comerciantes de las localidades (barrios) de Usme y Ciudad Bolívar. Básicamente van a ser 300 hombres (…) para garantizar mayor presencia, mayor movilidad, una mejor reacción”, agregó el general Alarcón.
Uno de los afectados fue Elkin Mendivelso, propietario de una tienda de electrodomésticos, que llegó a su local cuando ya se habían robado parte de la mercancía de su negocio.
“Un vecino me llamó para que viniera, me dijo que se habían entrado (al almacén). Cuando entré estaba saliendo una cantidad de personajes con la mercancía del almacén”, afirmó Mendivelso a Noticias Caracol.
El lunes pasado, las autoridades colombianas capturaron a tres presuntos testaferros de las FARC e incautaron bienes valuados en 650.000 millones de pesos (unos 230 millones de dólares), entre ellos 60 supermercados.
Tras conocerse esa noticia, ciudadanos en diferentes regiones del centro del país empezaron a saquear los comercios, por lo que en varios municipios fue necesario decretar el toque de queda.