Diferencia entre altruismo y filantropía

n

Se podría afirmar que ambos conceptos tienen el mismo espíritu, no obstante, sendos objetos no son iguales. Aun cuando sus razones de ser y sus entes son -entre lo bueno y lo bello- los mismos; el fin último o verdadera aspiración entre quienes ostentan tales virtudes, en cada uno es diferente. Luego, su etimología se refiere: Filantropía, del griego “filo” amor, “antro” hombre. Altruismo es sinónimo de filantropía, una palabra -se supone- creada por Auguste Comte en el siglo XVIII y,  constituida también, con una combinación de palabras con el mismo sesgo y diferente idioma: “alter” otro y “autrui”, aun cuando este último es derivado del latín también, se refiere a los demás, otra persona, connotando adjetivación, sea a otro como gente y no como cosa. 

n

Los filántropos se dedican a ayudar a gentes, pueblos y naciones que necesitan asistencia social, tanto alimentaria como higiénica y deportiva, fundan instituciones como: Hospitalarias, educativas, infantiles, deportivas etc. Su objeto es sufragar la necesidad de sectores, desposeídos y/o con deficiencia para sufragar necesidades básicas antes que, obtener algún tipo de lucro. Con este sesgo existen fundaciones pero no todas, pues, algunas tienen en su haber fines de lucro solapadas con altruismo para eludir impuestos y otros conceptos deducibles, el filántropo no observa esta característica por cuanto posee muchísima riqueza (ente) y ningún impuesto afectaría su economía o, simplemente nada, como la madre Teresa de Calcuta. El desarrollo de sus actos es evitado a la vista pública, de modo que los mismos llegan al conocimiento del público por su grandeza y no por su propaganda. Fin último: Intentar ayudar al prójimo (objeto). 

n

Altruismo tiene en su haber el mismo sesgo que la filantropía con una evidente y muy notable variante. El altruista se esmera en hacer saber sus actos, luego crea una esfera de contentiva de eventos donde sus actos e intenciones se hagan notar (propaganda), desde luego la voluntad aunque no sea genuina -casi siempre promovida por intereses alternos- es propia de querer hacer bien (ser). No obstante, el objeto es ganar imagen, ese es el verdadero fin último del altruista; hacer propaganda de una supuesta filantropía, que podría no tenerla y en vez, podría tener: una muy concreta aspiración: ganar poder como los políticos o evadir impuestos como los artistas, quienes son la mayoría de sus mejores ejemplos. Fin último: Además de intentar hacer bien, ganar poder, crear imagen  (objeto).

n

Conclusión: Filantropía, amor al hombre, amor al prójimo, hacer el bien sin ninguna clase de interés: ni crematístico, ni de personalidad. Altruismo hacer bien con la esperanza de hacer notar una personalidad filantrópica, donde se involucran los demás, a los otros.