Los
Quince delincuentes armados irrumpieron en las residencias Karla Karolin, en la calle 77 -5 de Julio- con avenida 3E de Maracaibo, desvalijaron 18 vehículos, se llevaron dos camionetas y saquearon un apartamento en el piso 16, en la misma área donde reside Renné Mesa García, representante de la embajada de Cuba para el occidente del país. La Policía presume que buscaban los dólares de uno de los vecinos.
El asalto lo reportaron a las 5.00 de la mañana. Aunque las víctimas denunciaron que los asaltantes se pasearon con sus armas cortas por el edificio desde las 12.00 de la medianoche hasta las 2.00 de la madrugada. Entraron por el estacionamiento principal, sometieron al único vigilante de turno, lo ataron y amordazaron. Caminaron hasta el piso subterráneo, donde se encontraban unos 20 carros propiedad de los inquilinos, rociaron las cámaras con spray azul, detalló la Policía.
Los maleantes se distribuyeron por el estacionamiento hexagonal y empezaron a descuartizar carro por carro durante dos horas. Mientras quitaban baterías, accesorios, cauchos, GPS y reproductores, llegaron dos residentes del edificio. Los apuntaron, los amarraron y los tiraron en un rincón del área para que vieran cómo desvalijaban 18 automóviles.
Al final tomaron a uno de los testigos y obligaron a abrirle la puerta principal. Subieron al piso 16, tocaron la puerta de una anciana. Tras las súplicas de la mujer, decidieron atracar a un vecino, a este le vaciaron el apartamento.
Los delincuentes bajaron con su botín, montaron parte en una Ford gris, modelo Explorer, año 2010 y otra Hyundai verde, modelo Tucson, año 2007. Regresaron a la garita de seguridad, tomaron los videos y huyeron.
Horas después, el propietario de una de las camionetas la recuperó por el sistema satelital en el sector El Varillal y la Policía consiguió la otra en el sector Zapara. A ambas las retuvo la Policía científica para las investigaciones.
Miedo
Las víctimas se resguardaron en su casa y solo salían cuando lo solicitaban los investigadores. Tenían miedo. Ninguno quería identificarse ni comprometerse.
“Lo que me sorprendió al bajar es ver todos los carros con la capota levantada. Ninguno tenía batería”, comentó una de las afectadas.
“Me dio grima verlas. Se llevaron las luces, las bolsas de aire, el GPS y el reproductor. Es humillante que algo así suceda”, dijo el padre de dos víctimas. Sus hijos, dueños de dos 4Runner, estaban de viaje y se tuvo que acercar para certificar los daños de las camionetas, estas fueron las que desvalijaron por completo.
La dueña de un Chrysler Neon expresó: “Tuve suerte, no les dio tiempo de llevarse los cauchos porque aún tenía el gato que usaron, aunque me dejaron sin batería”.
La docena de afectados coincidieron al quejarse de la inseguridad. “Hasta para estacionar en nuestras casas debemos tener miedo. Todo lo que se llevaron es difícil reponer”.
Complicidad
Biagio Parisi, secretario de Seguridad y Orden Público, sospecha que hubo complicidad y que el asalto lo organizaron hace días. “Conocían dónde accionar las entradas, dónde se ubicaban los dispositivos de seguridad, actuaron en un horario que las personas no se dieran cuenta. Lamentablemente llegaron esos ciudadanos. Fue un robo básicamente destinado a piezas y partes automotrices”.
El comisario detalló que se distribuyeron en puntos estratégicos del lugar para vigilar. Para mantenerse comunicados utilizaron radios. Presume que un camión los esperaba y pudieron trasladar todo lo robado. Luego de terminar se llevaron todas las grabaciones de seguridad, para no dejar rastros.
El edificio cuenta con cerco eléctrico, cámaras de seguridad en todos los pasillos y tiene dos estacionamientos. Todo se maneja de manera electrónica. Algo falló en el sistema y el hampa arrasó con todas las pertenencias.
En cifras
12 cauchos hurtaron. Solo les dio tiempo quitarle los cuatro neumáticos a tres vehículos. Removían las llantas de un cuarto carro cuando se les acabó el tiempo.
18 baterías se llevaron del estacionamiento subterráneo. Golpearon y forzaron las capotas de los carros para acceder.
1 vehículo lo despojaron de dos puertas, a otro le desprendieron el parachoques para arrancarle las luces.