La
Este lunes, el ejército israelí anunció la instalación de la primera base militar norteamericana en su territorio, como parte de la estrecha cooperación bélica entre ambos países, informó el comandante de la defensa aérea israelí, Tzvika Haimovich.
Este brigadier general dijo que la nueva base militar no contradice el empeño israelí por demostrar su autosuficiencia a la hora de defenderse de sus enemigos: “No es contradictorio con nuestras capacidades, cooperamos con EEUU, pero no a cualquier precio”, aseguró a EFE.
El mensaje que Israel quiere transmitir a la zona es que “trabajamos junto al mayor ejército del mundo”, dijo.
Según Haimovich, varias docenas de soldados norteamericanos estarán estacionados de modo permanente en la base y operarán sistemas norteamericanos, no israelíes, subrayó.
El comandante del aire no quiso hablar sobre la posibilidad de que los soldados norteamericanos participasen en operaciones de combate, pero sí afirmó que “es mucho más significativo que eso. Hay una presencia americana aquí, una fuerza militar, no civil”.
La construcción de la base, en el sur del país, se ha estado gestando durante dos años y el proceso “ha sido fluido, porque la relación entre las aviaciones de ambos países, entre los comandantes de ambos ejércitos, es más fuerte que la relación entre los líderes políticos y las administraciones”, afirmó Haimovich.
La defensa aérea de Israel cuenta hoy con el sistema Cúpula de Hierro, diseñado para derribar misiles de corto alcance, y el sistema Arrow, capaz de interceptar misiles balísticos fuera de la atmósfera terrestre.