Kevin De Bruyne e Ílkay Gündogan tuvieron una noche fantástica, anotando uno y dos goles respectivamente, para firmar una espectacular remontada que los acerca a octavos
El Manchester City, impulsado por Kevin De Bruyne e Ílkay Gündogan, consiguió una espectacular remontada de 3 a 1 frente al Barcelona, con lo que vengó el partido de ida donde cayeron goleados (4-0) frente a los azulgranas en el Camp Nou.
Los dirigidos por Luis Enrique dominaron los primeros minutos y se fueron arriba en el minuto 21 con gol de Lionel Messi tras una gran jugada que inició en un saque de esquina contrario. Sin embargo, los ingleses empataron el partido antes de terminar el primer tiempo gracias a un gol de Gündogan que se originó luego de que Sergi Roberto errara un pase en salida que Sergio Agüero recuperó para pasar a Sterling, quien asistió al turco dejándolo completamente solo para rematar a placer.
En el segundo tiempo los locales arrancaron con todo y apenas tardaron cinco minutos en poner el segundo. El belga De Bruyne pateó un tiro libre que se le coló en el ángulo a Ter Stegen y a partir de ahí los pupilos de Josep “Pep” Guardiola dominaron el partido, generando diversas ocasiones de gol.
El tercero y último lo marcó Gündogan en una polémica jugada donde el balón pegó en la mano de Agüero antes de que el volante anotara, pero el árbitro consideró que no fue intencional.
Con esta victoria los británicos se acercaron a su clasificación a octavos, mientras que los españoles no pudieron asegurar su pase directo, el cual tendrán que buscar en la próxima jornada.
“Ganamos al mejor del mundo”
Guardiola mostró su satisfacción por el resultado, afirmando que “hemos ganado al mejor equipo del mundo”. En ese sentido, afirmó que “ellos llevan jugando así 20 ó 25 años y nosotros solo tres o cuatro meses. Esto es un proceso que necesita 15 o 20 años para asentarse entre los mejores del mundo y nosotros vamos a intentar acortar esos plazos”.
En el otro partido del Grupo C el Celtic escocés igualó a un gol con el Borussia Mönchengladbach; un punto que le sirve más a los alemanes en la lucha por el tercer lugar, que le asegura la clasificación a la Europa League.