El TSJ le está impidiendo al pueblo venezolano buscar una salida democrática a la catástrofe que vive el país producto del desastroso Gobierno de Nicolás Maduro
Es verdaderamente lamentable que una de las instituciones que están obligadas a ser soportes del sistema democrático venezolano, como es el TSJ, se haya convertido en una especie de garrote que utiliza un régimen corrompido y detestado, como es el que dirige Nicolás Maduro para tratar de mantenerse a flote y seguir en su lamentable tarea de destruir lo que aún queda en pie en Venezuela.
Sus miembros, seleccionados de manera fraudulenta y alejada de las normativas que establece la propia Constitución, están en esos puestos para dedicarse con exclusividad a torpedear las acciones de la Asamblea Nacional en su empeño de cumplirle al electorado que votó masivamente por ellos la agenda que formularon en la campaña electoral para las elecciones del 6-D del 2015.
Su última resolución sobre la enmienda a la Constitución para acortar el período del Presidente de la República y del resto de las instituciones y organismos de elección popular, sin haber sido aprobada esta en segunda discusión y sin conocer el texto final de la misma, es lo que se puede llamar una “perla” jurídica.
En la sentencia 274 el ponente, doctor Arcadio Ocando, sostiene lo siguiente: "En cuanto a la vigencia en el tiempo de una enmienda, esta no puede tener efectos retroactivos o ser de aplicación inmediata; admitir tal supuesto constituiría un quebrantamiento al ejercicio de la soberanía, ya que estaría desconociendo la voluntad del pueblo…".
Y preguntamos doctor Ocando, ¿ese tribunal que el presidente de la AN, Henry Ramos, ha calificado de malandros, al momento de declarar inconstitucionales todas las leyes que ha aprobado la AN, resultado de las propuestas que votó mayoritariamente el pueblo venezolano, no se ha percatado que está desconociendo la voluntad del pueblo venezolano que el 6 de diciembre votó contundentemente por la aprobación de una ley de amnistía, por la ley de propiedad para los adjudicatarios de la Gran Misión Vivienda, por la enmienda a la Constitución y otros instrumentos legales que aun el régimen no termina de promulgar?.
El TSJ le está impidiendo al pueblo venezolano buscar una salida democrática a la catástrofe que vive el país producto del desastroso Gobierno de Nicolás Maduro.
El TSJ defiende a la élite más corrupta e incapaz que haya podido ostentar el poder en Venezuela a lo largo de toda su historia republicana.
¿Será responsable el TSJ de cualquier salida violenta que suceda en el país, producto del cierre de todos los caminos democráticos que el pueblo tiene para decidir si el Presidente de la República sigue en el ejercicio de sus funciones?