Con un autogol de Gerard Piqué, la escuadra dirigida por Zinedine Zidane se impuso frente a los de casa en el primer “Clasico” oficial de la nueva temporada, con un hombre menos desde el minuto 82. El Real Madrid derrotó 3-1 al Barcelona en el Camp Nou en el partido de ida de la Supercopa de España
Impune Real Madrid. El conjunto de Zinedine Zidane venció 3-1 al Barcelona en el primer “Clásico” oficial de la temporada. En el partido de ida de la Supercopa de España, el superduelo español se tornó, con drama, de “blanco”, cuando, luego de que Gerard Piqué abriera el marcador con un autogol, el equipo madrileño, vestido de turquesa en esta oportunidad, derrotara a los azulgrana en el Camp Nou.
“Estoy muy orgulloso de los jugadores, porque hasta con 10 lo han hecho muy bien. Han creído en la victoria hasta el final. Lo bueno de esta plantilla es que todos cumplen, todos estamos concentrados y eso es motivo de satisfacción”, manifestó el estratega francés luego del partido, añadiendo que no se va a “meter con el árbitro. Me puede molestar la expulsión de Ronaldo. No hay penalti -la segunda fue por simularlo- pero la tarjeta es un poco fuerte. Pero esto es así y no lo podemos cambiar ahora”, sobre la salida del astro portugués, por doble amarilla, al minuto 82.
El atípico Clásico, segundo de la lista de cinco “clásicos” que habrá, como mínimo, esta temporada, tornó bastante atractivo el inicio de temporada de fútbol en España, con los eternos rivales mostrando un desempeño vistoso en ambas mitades durante todo el compromiso, que acabó con victoria para el conjunto de “Zizou”, que mantiene su racha invicta en la casa culé, con dos empates y un triunfo en sus tres partidos disputados.
Muy disputado en el medio
Empezó con pocas cosas llamativas; la máxima figura del cuadro visitante, Cristiano Ronaldo, estaba en el banquillo, luego de que Zidane apostara por salir con un 4-4-2 con Isco, y la sombra de la ausencia de Neymar aún merodeaba por el campo. En el medio de la cancha, ambos elencos se quedaban estancados, llegando poco, y con poco peligro, a las puertas de los rivales.
La oncena azulgrana, liderada por un Messi algo silencioso en los primeros 20 minutos, que probó el arco con un tiro libre que se fue justo por arriba, al minuto 24, se encargó de proponer tan solo un poco más que los merengues, que también tuvieron su oportunidad con un tiro de Gareth Bale, a pase de Isco, que estaba en papel estelar, que tapó de forma asertiva el guardameta alemán Ter Stegen.
Piqué abre la fiesta
Fue durante la segunda parte, a cinco minutos del inicio, que Gerard Piqué quebraría la igualdad, pero en su propia puerta: el lateral brasileño Marcelo envió un centro por la izquierda que el central catalán intentó despejar pero acabó por mandar al fondo de la red, al 50′. Ocho minutos después, “CR7” ingresaba al campo, sustituyendo al francés Karim Benzema, y luego entró Marco Asensio, por Mateo Kovacic, ambos fueron autores de los otros goles del Real Madrid.
Luego de un gol anulado a Cristiano por posición adelantada, el empate vendría con polémica: cuando corría el 76, Luis Suárez fabricó una falta dentro del área luego de que Keylor Navas saliera a buscar el balón en una acción peligrosa de los hombres de Ernesto Valverde; el juez decretó el penal y Lionel Messi convirtió desde los 12 pasos.
Y como si de responderle personalmente se tratara, Ronaldo, en una contra, frente a Piqué, apareció en el marcador mandando un bombazo a las redes de Ter Stegen desde el borde del área. No fue lo único que volvió, por minutos, al portugués en protagonista, pues -y al estilo de Messi en el “Clásico” de la temporada pasada en el Santiago Bernabéu- se quitó la camiseta en su celebración y vio el cartoncillo amarillo. Dos minutos después, en carrera, el delantero se tumbó en el área y el arbitró lo amonestó por simulación: era la segunda amarilla y se tuvo que marchar, convirtiéndose en el primer jugador suplente en toda la historia de los clásicos que anota gol y sale expulsado.
Luego Asensio puso la cereza en el helado, cuando el Barca, ya con un hombre más, amenazaba con la igualdad, sentenciando, en el 90, el partido con otro golazo por toda la escuadra. Así, el elenco merengue se quedó con la ida, tomando la ventaja en la Supercopa de España, donde ahora les tocará recibir al Barcelona en su patio, el próximo miércoles 16.