El papa Francisco volvió a dejar su residencia en el Vaticano este sábado 12 de abril y sorprendió a los fieles al presentarse en la basílica de Santa María la Mayor, en Roma.
El pontífice, que se recupera de una fuerte infección respiratoria, rezó ante el icono de la Virgen Salus Populi Romani, a pocas horas del inicio del Domingo de Ramos y la Semana Santa.
El Vaticano confirmó en un breve comunicado que la visita ocurrió a primera hora de la tarde. Francisco, de 88 años, llegó en silla de ruedas, con cánulas nasales para oxígeno y vistiendo el hábito papal blanco. Llevaba además una ofrenda floral, como muestran las imágenes en las que también se escucha a un fiel gritar “¡Viva México!”.
Devoto del icónico retrato mariano, el Papa suele acudir a Santa María la Mayor tras cada viaje o evento importante. Ya lo había hecho el pasado 23 de marzo tras salir del hospital.
Pese a que sus médicos recomendaron reposo absoluto durante al menos dos meses en la Casa Santa Marta, residencia que ocupa en el Vaticano, el Papa ha salido en varias oportunidades esta semana, lo que sugiere una mejora en su estado de salud.
El jueves apareció en la basílica de San Pedro, vestido con poncho, camiseta y pantalones oscuros, para supervisar la restauración del área de la Cátedra y orar en la tumba de Pío X y el miércoles recibió por sorpresa a los reyes del Reino Unido, Carlos III y Camila, quienes se encontraban de visita en Italia.
También el domingo anterior, Francisco se hizo presente al final de la misa del Jubileo de los enfermos para dar la bendición y saludar a los asistentes.
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