El papa Francisco sigue internado en el hospital Gemelli de Roma, donde lleva 23 días recibiendo tratamiento por una neumonía bilateral y otras complicaciones respiratorias. A pesar de su estado, el pontífice firmará la homilía que mañana domingo será leída en una misa del Jubileo.
Según fuentes vaticanas, el Papa continúa con la terapia prescrita y las sesiones de fisioterapia respiratoria y motora. Su condición se mantiene estable, aunque dentro de un cuadro clínico considerado “complejo”.
La Santa Sede prevé emitir un nuevo parte médico en las próximas horas, después de que ayer viernes no se publicara ninguna actualización debido a la estabilidad de su situación.
Para la misa del domingo, el cardenal canadiense Michael Czerny, prefecto del Dicasterio de Desarrollo Humano Integral, será el encargado de leer el mensaje preparado por Francisco.
Asimismo, el Vaticano evalúa la posibilidad de que el papa envíe un mensaje para el rezo del Ángelus, tal como ha hecho en las últimas semanas.
El papa, de 88 años, enfrenta un proceso de recuperación delicado, agravado por sus antecedentes médicos, ya que en su juventud le extirparon parte de un pulmón. Aunque no ha aparecido en público desde su ingreso, el jueves por la noche envió un mensaje en español, en el que se le notaba con la voz afectada y cansada.
La última actualización del Vaticano indicó que pasó una noche tranquila y se encuentra en reposo mientras continúa su tratamiento.
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