Seis latinas apuntan directo a ser la nueva miss Universo el próximo 29 de enero. Prensa internacional, expertos y missólogos dan como favoritas a estas latinas. Ellas tendrán que luchar con algunas asiáticas que batallan porque el título se quede en ese continente
Normalmente las latinas dominan el cuadro de finalistas del Miss Universo y tal parece que este año no será la excepción. A pesar de haber menos plazas, 12 en lugar de 16 como era costumbre, las representantes de los países latinoamericanos están subiendo como la espuma y colándose entre las grandes favoritas a llevarse el título que ostenta Pia Wurtzbach (miss Universo 2015).
En el tope están Venezuela y Colombia. Mariam Habach, de 20 años, se ha hecho sentir en Filipinas por su personalidad y haber destacado en varias actividades previas, donde conquistó tres premios especiales. Por su parte, Andrea Tovar se ha posicionado como favorita desde mucho antes de llegar a la competencia, sin embargo, no ha tenido la repercusión que se esperaba. Aun así es una de las consentidas del público, al igual que la venezolana.
Páginas especializadas como missology.com, una de las más confiables y visitadas, no han dejado de destacar la belleza exótica de la brasilera Raissa Santana. Ella creó polémica por se la única mujer de color en coronarse en el país carioca, en los últimos años. Santana goza de gran popularidad y se le ha visto impecable en sus apariciones. Al top se une la señorita Panamá, Keity Drennan. Su estampa de miss y modelo internacional ha enganchado a los seguidores del certamen. Ha resaltado en el grupo por su explosiva personalidad.
México, Nicaragua y República Dominicana han subido en los últimos días. Kristal Silva, de 25 años, busca la tercera corona para la región azteca. Sus ojos claros y belleza misteriosa mantienen cautivados a los filipinos. Mientras que Marina Jacoby llamó la atención de los críticos en el fashion show que se realizó hace unos días en el país anfitrión. El caso de la dominicana Sal García, quien solicitó a sus seguidores una donación económica para viajar al Miss Universo, hizo que su nombre sonara. Su belleza es indiscutible. La han comparado con la animadora Rosselin Sánchez.