Uruguay
Desde hace tres semanas el estado Bolívar volvió a ser el escenario en donde una enfermedad catalogada como controlada reapareció en medio de la crisis de salud. De forma extraoficial se confirmaron tres casos de sarampión en niños hospitalizados hace más de siete días en el Hospital Raúl Leoni de Guaiparo, el mismo centro de salud que tuvo que atender la oleada de afectados por difteria desde septiembre del año pasado.
En el ambulatorio Vista al Sol, en Ciudad Guayana, se atendieron dos casos con diagnóstico clínico que fueron remitidos al Hospital de Guaiparo hace dos semanas. Los médicos esperan resultados de otras 15 muestras que se enviaron al Instituto Nacional de Higiene, porque se tienen sospechas por los síntomas que presentaron los pacientes.
Ahora, las autoridades sanitarias de Uruguay y Guayana advirtieron a sus ciudadanos sobre el posible riesgo de la importación de casos de sarampión desde Venezuela. Datos sobre el brote que se inició en el municipio Caroní del estado Bolívar, fueron recolectados por la Sociedad Venezolana de Salud Pública y la Red Defendamos la Epidemiología Nacional, con fuente en los ministerios de Salud de ambos países, que presuntamente fueron informados directamente por la Organización Panamericana de Salud (OPS), sobre la emergencia de salud pública internacional.
Los especialistas venezolanos ofrecieron un balance de la enfermedad a través de una publicación, el pasado 2 de septiembre, para orientar sobre el riesgo de reaparición y preparan un documento de revisión actualizada sobre el tema, con recomendaciones específicas para la promoción de salud, prevención, diagnóstico, tratamiento de los casos y medidas de salud pública indispensables de aplicar.
De confirmarse la presencia de casos autóctonos de sarampión en Venezuela, el país estaría en la condición de emergencia luego de 10 años del último brote. Esta situación, anularía las declaraciones de la OPS que calificaron a la nación como territorio libre de sarampión, hace nueve meses. La afirmación de que el continente estaría libre de la amenaza para la salud, tampoco tendría consistencia de acuerdo a los epidemiólogos.