El Zulia despide al Poeta de La Virgen entre aplausos y gaitas

A las 10.00 de la mañana, el féretro con el cuerpo de Gil entró al templo de La Virgen de la Chinita, su mayor devoción, y fue recibido por la agrupación gaitera, La Cuerda Cabimera

Este miércoles se realizó la misa de cuerpo presente en la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá de la leyenda de la gaita, Jairo Gil, quien será recordado como El Poeta de La Virgen, por ser el compositor que más temas le ha ofrendado a la Patrona de los zulianos.

A las 10.00 de la mañana, el féretro con el cuerpo de Gil entró al templo de La Virgen de la Chinita, su mayor devoción, y fue recibido por la agrupación gaitera, La Cuerda Cabimera. Entre aplausos y luego la interpretación de la compilación de temas Misa zuliana, interpretados por Zagalines y la Coral de San Francisco de Asís, ensambles de la Fundación para la Gaita y la Cultura Padre Vílchez (Fundapavil), transcurrió la eucaristía.

En la Basílica, la despedida se colmó aún más emotiva, luego de que se entonara un popurrí de los temas Reina morena, Rapsodia gaitera, Señora de mis pensamientos, Dos regalos y Rostro bronceado, todos de la autoría de Jairo.

Familiares, gaiteros y el pueblo zuliano, tuvieron la oportunidad de despedir al ícono y patrimonio cultural del estado, Jairo Gil. La Cuerda Maracaibera fue la agrupación que despidió al ilustre.

La Cuerda Cabimera y La Cuerda Maracaibera, pertenecen al ensamble de la Secretaría del Poder Popular para la Gaita e Identidad Nacional, Ramón Soto Urdaneta.

Honor a quien honor merece

En las afueras de la Basílica se instaló una tarima, donde la agrupación gaitera, Los Chiquinquireños, en compañía de Yelitza Vílchez, Lula Silva, Dionel Gutiérrez y Douglas Ochoa, entonaron los emblemáticos temas del “compadre Jairo”, y fue despedido con Reina morena.

Señora de mis pensamientos, Mi vida es cantar, La elegida y Reina morena fueron algunos de los temas que pudieron corear los zulianos para despedir al gaitero.

Testimonios

“Su obra gaitera fue centrada y motivada por La Virgen. Nos deja un gran legado, sobre todo los elementos de la zulianidad recogida en el verbo versificado y su poética estilística, que sin tener conocimientos académicos, era un gran poeta y se evidencia en sus letras. Jairo fue pueblo y recogía en cuartetas, escuadrillas y más, todos los elementos de la cotidianidad del Zulia. A través de su gaita conocimos mucho”, Ramón Soto Urdaneta, locutor y presidente de Fundación de la Gaita Ricardo Aguirre y Ritmos Autóctonos del Estado Zulia (Fundagraez).

“Jairo Gil fue uno de los baluartes, bastiones e insignes compositores de esta tierra, que más allá de ofrendarnos amistad, nos enseñó a amar al Zulia a través de su musa. Nos enseñó humildad y nos comprometió a enarbolar la bandera de la zulianidad a través de la décima, de la danza, del vals, de la gaita. Hoy lo sembramos a la eternidad pero seguiremos cantando, mostrando y exaltando su gaita y su esencia”, Moraima Gutiérrez, conocida como “La tía Mora”, locutora.

“Para mí es un baluarte. Una vez buscamos un premio para darle a los gaiteros resaltantes de San Francisco y Ramón Soto (Urdaneta) me dijo que invitáramos a Jairo… Regionalizamos el premio y lo titulamos Premio María del Rosario de Chiquinquirá y se lo dimos a Jairo por sus composiciones a La Virgen, recuerdo que lloró como un muchacho. Él se va físicamente, pero se queda en nuestros corazones. El municipio San Francisco lo recordará siempre porque hasta el himno es escrito por él junto Nerio Ríos y Amador Bermúdez”, Dirwings Arrieta, alcalde de San Francisco.

“Vine en representación de mi hermana, Carmencita Silva, la cantante de La Virgen y de nuestro eterno Jairo Gil. Ella no pudo estar porque está de viaje, pero aquí estoy yo… Jairo le deja al Zulia un legado inmenso con sus gaitas, danzas y composiciones. Hoy estamos tristes porque Dios llamó a nuestro Jairo, pero dejó muchas cosas hermosas”, Lula Silva, cantante de Barrio Obrero de Cabimas y La Cuerda Cabimera.

“El tío Jairo, como yo lo llamo, lo conocí hace más de 30 años y se convirtió en mi guía, consejero y amigo. Recuerdo que hace meses, antes de enfermarse, me visitó y compartimos muchas anécdotas. Cuando por fin entregó un tema a mi agrupación, no lo grabé yo… él prometió darme un tema a mí, pero lamentablemente será cuando nos volvamos a encontrar en el cielo. Me tendió muchas veces las manos y estoy muy agradecida con Dios y La Virgen por permitirme conocer a un ser humano como él”, Yelitza Vílchez, cantante de la agrupación Racoa.