
La reapertura de la embajada de Emiratos Árabes Unidos en Damasco representa un impulso diplomático para el presidente Bashar al Asad por contar con un estado árabe que una vez respaldó a los rebeldes que lucharon contra su gobierno
Con el de objetivo normalizar los lazos y frenar los riesgos de interferencia regional en los “asuntos árabes y sirios”, el ministerio de Asuntos Exteriores de Emiratos Árabes Unidos (EAU) anunció este jueves 27 de diciembre la reapertura de la Embajada del país en Siria, que estaba clausurada desde 2011, cuando comenzó la guerra en ese país.
“Este paso subraya la disposición del Gobierno de EAU de restablecer las relaciones diplomáticas entre los dos países en su curso normal, para fortalecer y activar el rol árabe en el apoyo de la independencia, soberanía e integridad de la República Árabe Siria y en la prevención de las injerencias regionales en los asuntos árabes sirios”, señala un comunicado oficial de la cancillería.
Emiratos Árabes Unidos fue uno de varios estados de la región que respaldaron a los grupos armados que se oponen al gobierno de Bashar al Asad, aunque su papel fue menos prominente que el de Arabia Saudita, Catar o Turquía, según fuentes de grupos rebeldes en la región.
Los acercamientos entre la Liga Árabe y Siria
La Liga Árabe suspendió la membresía de Siria en noviembre 2011, tras el comienzo de la cruenta guerra que ha azotado a ese país desde entonces. Sin embargo, en las últimas semanas ha habido acercamientos de los países que conforman esa organización conformada por 22 estados miembros.
El presidente sudanés, Omar al Bashir, visitó Damasco el pasado 15 de diciembre y se reunió con su homólogo, Bashar al Asad, en una visita no anunciada, la primera de un mandatario árabe al país en guerra.
A ese gesto de acercamiento ahora se suma la reapertura de la embajada de EAU, a la que asistieron altos funcionarios sirios y de otros países árabes.
El encargado de negocios de EAU en Damasco, Abdulhamid Nuaimi, invitó a otros países a sumarse a la reapertura de sus embajadas en Siria para que sigan su ejemplo. El diplomático afirmó que, con la reapertura de la embajada en Damasco “Siria está de regreso al mundo árabe” y será “tan fuerte como siempre”.