En la comunidad hay colegios afectados por la presencia de los botaderos de desechos y cuando llueve las se agrava la situación
Desde enero no recogen la basura en el sector Santa María. Los habitantes aseguraron que no ve un camión del aseo urbano en lo que va de año. La ausencia de la recolección generó en cada esquina del sector la acumulación de desechos en los cruces de la comunidad.
En un recorrido que realizó el diario La Verdad, se evidenció la presencia de basureros en la zona que está ubicada en las adyacencias de la iglesia San Alfonso. La acumulación de los desechos genera la proliferación de malos olores.
La acumulación de desperdicios más grande de la zona está entre el templo y la unidad educativa Santa Ángela y por eso son los más afectados por los malos olores.
Entre los desechos tirados por las personas hay animales muertos que al descomponerse se expande la putrefacción por el área. Los más vulnerables son los alumnos y los transeúntes que manifiestan que tienen que desviarse para evitar la “pudrición”.
Eduardo Ramírez, representante del colegio Dolores Vargas de Urdaneta ubicado en el sector, señaló que por más de tres meses el camión del aseo no pasa y que todos los días tiene que “agarrar atajos” para evitar que su hija inhale el olor a basura y a animales muertos.
Aseguró que urge que: “la Alcaldía envíe los camiones del IMAU para que recojan la basura que está acumulada y que es perjudicial para la salud de los niños y la comunidad en general”.
Consecuencias
Las personas armaron estos botaderos en plena avenida porque según Clara Valbuena, una de las vecinas, “anteriormente el camión pasaba con frecuencia y cada quien colocaba su basura en el frente de su casa y ellos la recogían, pero eso quedo en el pasado”.
Contó que cuando llueve las calles se vuelven “un chiquero y la hediondez es inaguantable” lo que le produce fatiga. Argumentó que una de las consecuencias es la presencia de moscas. La vecina teme por su salud.
Otros de los problemas que preocupa a la comunidad es un poste de electricidad que está situado en el frente de la clínica San Alfonso que según vecinos está por caerse.
Uno de los vigilantes del centro clínico expresó: “Llevo más de un año trabajando para la clínica y desde que entré ya el poste estaba así. Corpoelec debe arreglarlo porque pude ocurrir una desgracia”.
La comunidad en general exige a las instituciones encargadas que hagan su trabajo y que atiendan las denuncias y den respuesta inmediata para evitar enfermedades.