El candidato presidencial por el partido Centrados, Enrique Márquez, manifestó este lunes 13 de mayo que el Zulia “está de rodillas frente al centralismo, la corrupción y el pésimo gobierno de Nicolás Maduro”. Sin embargo, sostiene que la población sabe que tiene que generar un cambio político de cara a los comicios del 28 de julio.
El exdiputado zuliano, en una rueda de prensa desde la Universidad Rafael Urdaneta, en Maracaibo, señaló que “como presidente de Venezuela que espero ser a partir del 28 de julio, digo desde acá que mi gobierno será el de la descentralización, será el gobierno que le entregará a gobernadores y alcaldes de vuelta todas sus competencias”.
El también exvicepresidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) rechazó la gestión del Gobierno nacional, quien asumió la administración de las carreteras, del Puente General Rafael Urdaneta, del Puerto de Maracaibo y del Aeropuerto Internacional La Chinita. “Todo eso está mejor administrado en mano de los gobernadores y alcaldes, mejor que en manos del poder nacional”, añadió.
El aspirante presidencial promete, si llega al poder, descentrar la prestación del servicio eléctrico para garantizar que haya electricidad en todos los hogares zulianos. “Impulsaremos la descentralización para la construcción de empresas estatales, tendremos de vuelta en el Zulia y en cada estado del país, una empresa eléctrica que será administrada por sus gobernadores y por sus alcaldes”, dijo.
A su juicio, el centralismo lo que ha traído son problemas. Por ello, “propongo que exista una ley que impida o que garantice que todas esas competencias y recursos ya sepa todo el mundo para donde van, sin que el presidente de la República en un acto personalista pueda tomar una decisión contraria”.
Desde el Zulia, el también ingeniero electricista señaló que “llegó la hora de la descentralización, de recuperar el camino perdido, de darle más poder a las regiones y a los municipios”.
“Un constructor de consensos”
Márquez manifestó que continúa en la candidatura presidencial, aun sabiendo de la polarización, porque no confía en este gobierno. “No soy un obstáculo porque yo quiero un cambio para mi país y es posible que todas estas ideas no caigan en terreno fértil y yo no pueda crecer, es posible, un político corre ese riesgo, de no estar en el tiempo adecuado para sus ideas. Y si en el momento dado yo considero que debo apoyar, apoyaré. Pero si en el momento considero que debo ser apoyado, pediré ese apoyo también. Esperemos llegar allí en función de darle tranquilidad al pueblo venezolano”.
Para finalizar, Márquez aseguró respetar a todos los sectores de la oposición. “Todos vamos a ser necesarios y uno de los atributos que le ofrezco a mi país, que creo tener, es que soy un constructor de consensos y allí hay que meter a todo el mundo, incluido aquellos que de alguna manera no coinciden con algún sector de la oposición. Vengan todos porque vamos a ser un gobierno de todos para salvar este país”.
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