La diputada zuliana Elimar Díaz aseguró que al canal lo sacaron del aire pero no del corazón de los venezolanos. Este sábado, durante la marcha por la Libertad de Expresión en la ciudad de Maracaibo, reiteró su rechazo a la planta televisiva y destacó como las denuncias contra el gobierno no se silenciaron con esa medida sino que por el contrario se multiplicaron
Hace 10 años dejaron sus pupitres vacíos en la universidad para salir a exigir al hoy fallecido presidente Hugo Chávez, la renovación de la concesión a Radio Caracas Televisión (RCTV); nacía así la “Generación 2007” que desde entonces luchan sin descanso y sin tregua por la libertad en Venezuela.
Elimar Díaz, en aquel momento estudiante de Ciencias Políticas; y hoy día diputada de la Asamblea Nacional, es parte de ese movimiento estudiantil que se levantó prácticamente justo cuando fueron apagados los transmisores del canal pionero en Venezuela.
“A pesar del ‘gas del bueno’, que ordenaron echarnos en aquel momento, no nos amilanamos y aquí estamos: luchando por la libertad; en el 2007 era por la libertad de expresión y hoy es por la libertad de Venezuela. Los de la Generación 2007 no descansaremos hasta que regrese RCTV al aire, tenemos un compromiso con su audiencia”, asestó la parlamentaria este sábado durante la marcha por la Libertad de Información, en Maracaibo.
Díaz recordó que, a pesar del cierre del canal de Quinta Crespo, las denuncias contra “un Gobierno marcado por la extrema corrupción” no cesaron, sino que se multiplicaron.
“Los periodistas venezolanos son del tamaño del compromiso que se les presenta y lo han dejado bien sentado. Aunque les cierran canales, emisoras de radio, periódicos, les tumban las webs y pare de contar; siempre cumplen con su deber de informar y denunciar cada caso de corrupción, abuso y exceso en estos 18 años de un Gobierno que ya va de salida”.
La diputada zuliana consideró que la orden de Chávez de cerrar Radio Caracas Televisión lo que hizo fue sacarlo del aire, pero no del corazón y la memoria de los venezolanos.
“A RCTV lo cerraron, pero no pudieron acabar con su recuerdo. Con cada caso de corrupción, con cada abuso de poder, con cada caso de violación de DDHH, nos acordamos del canal porque decimos: si RCTV estuviera al aire, estuviéramos viendo esto y mucho más”.
Después de 10 años, Díaz reafirma su enérgica condena a ese “capricho” en el que se convirtió el cierre del canal 2.