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“Emery siempre nos complica la vida”. Con esta frase Luis Enrique, entrenador del Barcelona, advirtió, en una rueda de prensa antes del partido, lo que ayer podía ocurrir dentro de la cancha. El París Saint-Germain, comandando por Ángel Di María, Edinson Cavani y Julian Draxler, le propinó en Champions League una contundente goleada de 4 por 0 a un irreconocible Barcelona, en el Parque de los Príncipes, de Francia.
La masacre comenzó en los pies de Di María, quien en el minuto 18 aprovechó un tiro libre en el borde del área para marcar un auténtico golazo. El Barca, que hasta ese momento era claramente inferior, tuvo una ligera reacción positiva y en el 26’ el portugués André Gomes tuvo el empate, en un mano a mano frente al guardameta Kevin Trapp, pero su remate salió desviado.
Sin embargo, al 39’ el PSG colocaría el 2 a 0 gracias a un tanto de Draxler, quien aprovechando un robo de balón en la mitad de la cancha del italiano Marco Verratti a Lionel Messi, definió completamente solo ante un Ter Stegen que nada pudo hacer. Con este resultado, ambos equipos se marcharon al vestidor.
Más fiesta parisina
En la segunda mitad las cosas no cambiaron. El equipo francés continuó siendo claro dominador del encuentro y mientras el club azulgrana tocaba y tocaba la pelota sin llegar al arco, los dirigidos por Unai Emery aprovechaban cada pelota que tomaban para contragolpear y generar ocasiones peligrosas.
En el 54’ llegaría el gol del partido. Nuevamente sería “Angelito”, quien tras una espectacular jugada individual sacó un zurdazo que se le coló en el ángulo al portero barcelonista. La euforia de una afición que veía a sus ídolos aplastando a uno de los mejores equipos del mundo, se hizo sentir con gritos y aplausos.
El argentino se marcharía con una gran ovación 7 minutos más tarde, siendo sustituido por el brasileño Lucas Moura.
Con este cambio, todo indicaba que Emery quería ponerle el candado al partido, colocando hombres de tenencia y sacando a jugadores más rápidos. No obstante, sus pupilos tenían otros planes y estaban seguros de que ganar por 3 goles no era suficiente, por lo que en el 71’ llegaría el cuarto y último del partido: Thomas Meunier, lateral derecho del equipo local, que había tenido un increíble partido anulando por completo a Neymar Jr, tomó una pelota en su zona defensiva y, sacando una carrera de cancha a cancha, logró llegar cerca de la media luna del área culé, donde alzó la cabeza y vio al uruguayo Cavani desmarcarse, para luego asistirlo y que este sacara un derechazo soberbio para completar la histórica victoria.
Equipo de clase mundial
El entrenador de los catalanes, Luis Enrique, elogió el partido jugado por el equipo rival, afirmando que cuenta con “jugadores de clase mundial”.
“Nuestro adversario nos empujó desde el principio. Sin duda, el PSG ha sido mejor en el uso de la bola”, reconoció.
Por su parte, Emery afirmó que “hay que estar equilibrados en todas las competiciones”, y destacó que sus jugadores fueron mejor ante “un gran equipo”.
“Tengo gran respeto por el Barcelona. El equipo tuvo mucha concentración”, resaltó el español.
En la pasada edición de la Liga de Campeones, el Barca se impuso 5 a 1 en el global ante los parisinos, en cuartos de final. Este año, parece poco probable que los españoles puedan remontar el resultado, en el Camp Nou, el 8 de marzo, y conseguir nuevamente eliminar al equipo de París.