El pasado 7 de noviembre, por ejemplo, la empresa estadounidense reveló que había cerrado 115 cuentas de su plataforma y de Instagram en víspera de las elecciones legislativas en Estados Unidos al hallar que estaban vinculadas a piratas informáticos rusos y que pretendían influir en el proceso electoral
La multinacional estadounidense Facebook informó este jueves de que ha desactivado alrededor de 500 cuentas, páginas y grupos con origen en Rusia que buscaban influir de forma “no auténtica”, es decir, falseando su identidad, en Ucrania y una serie de países en Asia central, Europa del Este y el Cáucaso.
En una entrada en el blog de la compañía, el jefe de políticas de ciberseguridad de Facebook, Nathaniel Gleicher, explicó que se trata de dos “operaciones” coordinadas distintas y sin vínculos entre ellas, aunque ambas usaban “tácticas similares consistentes en crear redes de cuentas que confundiesen a terceros sobre quiénes eran y qué estaban haciendo”.
Una de las campañas, que se dirigía específicamente a Ucrania, estaba compuesta por 107 cuentas, páginas y grupos de Facebook, así como 41 cuentas de Instagram (propiedad de la compañía), todas ellas con origen en Rusia.
Las cuentas fingían ser ucranianas y desde ellas se compartían noticias locales sobre el país del Mar Negro, relativas a todo tipo de cuestiones como el tiempo, protestas en las calles, la OTAN, y las condiciones sanitarias en las escuelas.
Pese a la apariencia inocua de algunos de estos contenidos, por tal de favorecer la transparencia y confianza de los usuarios, Facebook no permite fingir la identidad en la red social.
Además, podría darse el caso de que estas cuentas usasen la confianza establecida con los usuarios para, a largo plazo, hacerles llegar contenidos con más carga política.
La empresa que dirige Mark Zuckerberg indicó que retiró las cuentas y páginas de esta campaña en Ucrania al ser avisada por las fuerzas de seguridad de Estados Unidos y que, una vez alertados, identificaron “similitudes técnicas” con los intentos con origen en Rusia de influir en las elecciones legislativas de EEUU el pasado noviembre.
La segunda operación “desactivada” no se centraba en un solo país como en el caso de la de Ucrania, sino que tenía como objetivos a Rumanía, Estonia, Letonia, Lituania, Armenia, Azerbaiyán, Georgia, Tayikistán, Uzbekistán, Kazajistán, Moldavia, Kirguizistán y la propia Rusia.
Las 364 páginas y cuentas desactivadas por Facebook y que operaban de forma coordinada desde Rusia en estos países fingían ser plataformas de noticias o de interés general independientes sobre materias como el tiempo, viajes, deportes, economía o política.
La empresa con sede en Menlo Park (California, EEUU) explicó que halló vínculos de todas estas páginas y cuentas con empleados de Sputnik, una agencia de noticias con sede en Moscú, y mediante la cual colgaban en la red contenidos contrarios a la OTAN o relativos a protestas sociales y denuncias contra la corrupción.
El de hoy es el último episodio de una larga lista de esfuerzos por parte de Facebook para desactivar campañas “no auténticas” con origen en Rusia u otros países como Irán y que buscan desestabilizar o influir en otras partes del mundo.