La renombrada artista visual y escritora Ofelia Soto falleció la madrugada de este jueves 30 de enero, a los 92 años, en Maracaibo, informó el periódico literario y cultural El Maracaibeño, sin ofrecer más detalles.
La también docente, quien nació el 28 de enero de 1933 en Morelia, México, y se radicó en Maracaibo en 1969, deja un invaluable legado en el arte y la crítica cultural en el Zulia.
Desempeñó un papel fundamental en la escena artística y académica de la región. Estudiosa del arte en la Academia de San Carlos y en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (Unam), Soto fue alumna del prestigioso historiador y crítico de arte, Justino Fernández, reseña El Maracaibeño.
“Su pasión por las artes la llevó a explorar la pintura en el taller de Ardash en París, el grabado y la serigrafía en la Escuela Julio Árraga y el arte del tapiz en los talleres Mali-Mai y La Madriguera de Maracaibo”, añadió.
Soto fue miembro número 35 de la Asociación Internacional de Críticos de Arte (Aica), asesora cultural del rector Humberto La Roche y ocupó la Dirección de Cultura de la Universidad del Zulia (LUZ).
También se desempeñó como profesora del Seminario de corrientes estético-literarias del postgrado en literatura de LUZ.
Su trayectoria en las artes visuales y la crítica cultural fue reconocida con numerosos homenajes y distinciones. En 1995, la Gobernación del Zulia le otorgó la Orden Armando Reverón en reconocimiento a su contribución al arte regional.
Además, en 2016, la Feria Internacional de Arte y Antigüedades de Maracaibo (Fiaam) le rindió homenaje por su destacada labor y legado artístico. Su obra ha sido descrita por el crítico Sergio Antillano como “la expresión de una sensibilidad sumamente refinada a la que no se le ha rendido el reconocimiento que merece”.
A lo largo de su carrera, la artista realizó numerosas exposiciones en reconocidos espacios, como la galería Gaudí de Maracaibo, el Museo Municipal de Artes Gráficas, el Centro de Bellas Artes de Maracaibo, la Sala Julio Árraga, el Museo de Arte de Barquisimeto y la Casa de la Cultura de Maracay, entre otros, destaca El Maracaibeño.
También se exhibieron sus obras en la galería El Muro en Caracas y en la Alianza Francesa de Maracaibo.
En 2009, su obra “Para cazar el bisonte” fue exhibida en el Museo de Arte Contemporáneo del Zulia (Maczul), consolidando su posición como una de las artistas más influyentes en el panorama visual venezolano.
Su legado fue inmortalizado en el documental “Ofelia Soto: Ecos de una memoria”, el cual fue finalista en la categoría de mejor mediometraje documental en el Premio Municipal de Cine de Chacao, destacando su impacto en el arte y la cultura.
Fuente: El Maracaibeño
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