
Ana María Velásquez, presidenta del Colegio de Enfermeras de Acarigua Araure, confirmó que en los últimos 14 días fallecieron en el Hospital Jesús María Casal Ramos, de esa localidad, siete recién nacidos, y advierte sobre la contaminación por bacterias de las áreas de Neonatología de dicho centro asistencial
Según los registros del servicio de Ginecología y Obstetricia, a cargo del médico especialista Manuel Suárez, la cifra sube. “Son 11 los neonatos muertos hasta ahora. Cinco de ellos por prematuridad y el resto por infecciones y malformaciones”, informó.
Velásquez aseguró ayer a El Pitazo que el fallecimiento de los neonatos constituye un motivo de alarma en el marco de la crisis humanitaria que se vive en Venezuela y que se palpa a diario en los centros de salud del estado Portuguesa.
La sala de Neonatología del Casal Ramos tiene una capacidad promedio de atención de entre 20 y 30 recién nacidos, pero dada la prevalencia de bacterias solo se instalan en las incubadoras a unos nueve o cinco bebés en estado crítico, que resisten hasta sin aire acondicionado.
Según Velásquez, los niños nacidos por cesárea están siendo entregados a la madre a riesgo propio y llevados a las salas de maternidad. “Allí corren peligro porque esas áreas también están contaminadas”.
Las declaraciones de Velásquez se producen desde la planta baja del hospital de Acarigua Araure, donde el personal de salud cumple jornada de brazos caídos por la contaminación propagada en el Casal Ramos. La cava de la morgue colapsó y este está técnicamente clausurado.