El mecanismo es un robot que simula un trasero humano para probar la duración de los asientos de los autos de la firma
La fábrica Ford creó una máquina llamada Robutt , la cual es un trasero robótico cuya función es mantener a la temperatura y calor del cuerpo humano, transpirar y sudar para evaluar la duración, resistencia y calidad de los asientos de la marca Ford.
Robutt es un cojín conectado a un brazo robótico grande que mantiene una temperatura de 36 grados centígrados y emana 450 mililitros de agua para simular la sudoración del cuerpo de la persona. Pues, el ser humano produce hasta 1,4 litros de sudor cuando hace ejercicio.
Este funciona cuando el mecanismo del brazo lo presiona sobre el asiento 7 mil 500 veces, pues la empresa calcula que esa es la cifra de uso del asiento en una década. Los cojines de la marca están diseñados en base a la exigencia, presión y desgaste que causa un hombre grande sobre el mueble.
El mecanismo Robutt se probó en los asientos del Ford Fiesta 2018 y se implementará en todos los automóviles de Ford en Europa. La industria asegura que “El Robutt es una excelente forma de verificar cómo se verán los asientos en los próximos diez años”.
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