
Cientos
El papa Francisco llegó ayer en la tarde a La Habana, a donde lo recibió el presidente cubano Raúl Castro apenas el argentino bajó del avión que lo llevó desde Roma. Un grupo de niños dio un ramo de flores al pontífice, quien los abrazó uno por uno.
Castro recibió al pontífice en el aeropuerto José Martí con palabras de elogio a las encíclicas papales sobre temas sociales y ambientales.
Tras un discurso, Francisco inició su recorrido por tierra desde el aeropuerto hacia la Nunciatura de La Habana, donde pasó la noche. El pontífice saludaba desde el papamóvil a los miles de cubanos que salieron a las calles para verlo en su primera visita a Cuba.
Largas líneas de personas se extendían al paso del papa. Muchos ondeaban banderas del Vaticano y de Cuba. En las inmediaciones de la Nunciatura, otros miles cantaban en espera del pontífice.
"¡Ya viene, ya viene!", gritaban cientos de personas en las inmediaciones de la casona cuando vieron que el papamóvil se acercaba. Y una vez que arribó, los gritos de emoción dieron paso a un: "¡Francisco, hermano, ya eres un cubano!".
A romper atmósferas
El papa animó ayer a Cuba y a Estados Unidos a "continuar avanzando" en la normalización de sus relaciones y a "desarrollar todas sus potencialidades", en el discurso que pronunció a su llegada a La Habana.
"Estamos siendo testigos de un acontecimiento que nos llena de esperanza: el proceso de normalización de las relaciones entre dos pueblos, tras años de distanciamiento. Es un proceso, un signo de la victoria de la cultura del encuentro, del diálogo", dijo el pontífice en la ceremonia de su recibimiento en el Aeropuerto Internacional José Martí de la capital cubana.
El papa animó a los responsables políticos de ambos países "a continuar avanzando" por este camino "como prueba del alto servicio que están llamados a prestar a favor de la paz y el bienestar de sus pueblos, de toda América, y como ejemplo de reconciliación para el mundo entero".
"El mundo necesita reconciliación en esta atmósfera de tercera guerra mundial a trozos que estamos viviendo", dijo el papa.
Francisco, el tercer pontífice que visita Cuba en 17 años, llegó ayer a la isla en la primera etapa de un viaje que después le llevará a Estados Unidos, dos países en proceso de normalización de sus relaciones y en cuyo acercamiento el papa tuvo un papel crucial.
Castro agradece
El presidente Raúl Castro agradeció al papa Francisco su apoyo para el acercamiento entre Cuba y Estados Unidos.
"El restablecimiento de relaciones diplomáticas ha sido un primer paso en el proceso hacia la normalización de los vínculos entre ambos países que requerirá resolver problemas y reparar injusticias", dijo en el aeropuerto internacional de La Habana en la ceremonia de recepción del pontífice.
Castro dijo que el embargo que mantiene Washington a Cuba "debe cesar" y lo calificó de "cruel, inmoral e ilegal".