Haití
Diez días después del embate de Matthew, el Gobierno y los organismos internacionales redoblan sus esfuerzos para asistir a los afectados, pero las precarias condiciones de las carreteras de las zonas más afectadas hace más lento el proceso.
La desesperación se apodera de aquellos que hasta ahora reciben poco o nada, por lo que es necesaria la presencia, en algunos casos en la ciudad costera de Jeremie, de policías o cascos azules de la ONU para colaborar en los repartos de la ayuda humanitaria que llega del exterior.
Las más recientes cifras provisionales divulgadas el martes por Protección Civil establecen que Matthew causó la muerte a 473 personas, produjo heridas a 339, 75 desaparecidos y obligó el desplazamiento de 175 mil personas alojadas en 224 refugios.
Fuentes de organismos de socorro y autoridades locales aseguraban el viernes pasado que las víctimas mortales sobrepasan las 800 personas, y la ONU advirtió este miércoles de que la cifra oficial continuará aumentando aunque no cree que llegue al millar.
Matthew afectó 2,1 millones de personas, de las que 1,4 millones, entre ellas 592 mil 581 niños, necesitan asistencia humanitaria, precisó ayer la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).