La diseñadora dejó una carta y se ahorcó con una bufanda en su apartamento de Park Avenue, en Manhattan, indicó a la AFP un portavoz de la policía. Tenía 55 años
La diseñadora de moda estadounidense, Kate Spade, fundadora de una icónica marca multimillonaria, conocida sobre todo por sus elegantes carteras coloridas y urbanas, se suicidó ayer en su domicilio de Nueva York. Tenía 55 años.
La diseñadora dejó una carta y se ahorcó con una bufanda en su apartamento de Park Avenue, en Manhattan, indicó a la AFP un portavoz de la policía.
Spade fundó en 1993 con su pareja, el publicitario Andy Spade, una marca alegre, con dosis de retro y nerd, que alcanzó la fama. Primero produjo coloridas carteras que se volvieron icónicas y se tornaron un símbolo de estatus para muchas jóvenes estadounidenses y de todo el mundo. Luego agregó una línea de vestimenta, a la que siguieron joyas, perfumes, zapatos, ropa de cama, de mesa y de bebé, y hasta una línea de papelería y regalos.
La diseñadora y su marido vendieron en 1999 un 56 % de su marca a Neiman Marcus por 34 millones de dólares, según Forbes. En 2006 le vendieron el resto, por otros 59 millones, con lo cual la diseñadora quedó para siempre desvinculada de la casa que llevaba su nombre. Spade se dedicó entonces a criar a su pequeña hija y a obras de beneficencia, una semana después de hacerse con la totalidad de la empresa, Marcus vendió la marca a Liz Claiborne por 124 millones de dólares, incluido deudas. En 2017 Kate Spade fue comprada por Coach por dos mil 400 millones de dólares, pero la diseñadora no recibió un centavo de esa transacción porque ya se había desprendido de la totalidad de sus acciones.