La delincuencia se vistió de estudiante y atacó la escuela de la Universidad del Zulia. La Policía científica detuvo a los vigilantes para que rindieran declaraciones mientras que los directivos de LUZ evalúan las perdidas
La Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad del Zulia (LUZ) sufrió la madrugada de ayer un “mega robo” en sus instalaciones. Entre 10 y 15 maleantes ingresaron a la casa de estudio, llevándose 15 aires acondicionados y una computadora.
José Manuel Rodríguez, decano de la facultad, explicó que un grupo de delincuentes entró en horas de la madrugada y que la zona es resguardada por solo dos vigilantes -uno pertenece a una empresa privada y otro de la Dirección de Seguridad Integral (DSI) de la universidad-. “A las 3.30 de la madrugada me llamaron y me notificaron del caso e inmediatamente vine para constatar el robo”. Señaló el incidente como el más grande que han sufrido.
Los vigilantes de turno escucharon una alarma encendida en la facultad de Agronomía, por lo que acudieron al sitio, expresó Rodríguez, quien indicó que media hora más tarde regresaron y se percataron de lo ocurrido en el quinto y último piso de la edificación. La máxima autoridad de la escuela recorrió las áreas explicando que los delincuentes “cargaron las cosas por la escalera de seguridad del ala oeste de la facultad”, lo que no logró explicar fue cómo ingresaron a la escuela, pero no descarta que pudieran colarse por un ventanal.
Los daños
Las oficinas afectadas son la Oficina de Investigaciones y Posgrado, Oficinas de Gerencia, Farmacología y Desarrollo; Oficinas de Inmunología, Reproducción, Agroecología, y Salud Publica; Oficinas de Zootecnia, Nutrición, Genética, PPII Producción Animal; Oficinas de Extensión, Consejo de Facultad y Administraciones. Así como a toda la población estudiantil que actualmente hacen vida académica en la facultad. “Son más de 100 profesores y más de mil 500 estudiantes los que aquí ven clases”.
La reja de protección del Consejo de Facultad la violentaron con una barra de hierro, ingresaron y sacaron una computadora de escritorio, una copiadora multifuncional marca Canon que dejaron botada en el piso cuatro. Una de las oficinas quedó completamente desordenada y una computadora desconectada que “se presume que se la querían llevar pero no les dio tiempo”, señaló Rodríguez.
Detalló que también robaron las unidades de los aires acondicionados. “Se tomaron su tiempo, desenroscaron cada empate, cuando normalmente el ladrón las rompe”. Explicó que cerca de 12 unidades de aires tipos split fueron robadas. Sin embargo, un secretario de seguridad realizó un recorrido y contabilizó que faltaban siete unidades.
El secretario aprovechó y fustigó contra la administración de la facultad, señalándolos de irresponsables por las precarias condiciones de la estructura metálica de la escalera de seguridad. “Las barras están oxidadas, los maleantes rompieron unas barras y salieron, pero para llegar hasta los aires faltan dos barras. Esas las quitaron los de mantenimiento ya que constantemente botan las llaves de las rejas y esto les pareció una mejor solución” dijo el empleado.
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OTROS ROBOS
. Hace más de un mes en la Facultad Clínica Veterinaria se robaron un compresor de un aire acondicionado.
. En febrero, trabajadores de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad del Zulia (LUZ) protestaron y cerraron el acceso a la universidad por robo de baterías de los vehículos de trabajadores de la institución.
. En años anteriores se han registrado otros hurtos en el alma máter del estado. En el último semestre del año 2013 la facultad resultó de nuevo víctima, cuando delincuentes robaron el cableado eléctrico de la azotea del edificio. “Eso fue muy difícil para nosotros. Se tuvo que hacer un trabajo macro para poner de nuevo el cableado” sostuvo Rodríguez mientras que recordaba que se colocó cercado eléctrico para evitar futuros robos.
CUESTA ARRIBA
Los vigilantes no dejaron pasar la ocasión y explicaron que la falta de equipos de seguridad les hace cuesta arriba su buen trabajo. “No tenemos nada. Necesitamos lámparas para hacer el recorrido, ellos armados y nosotros ni un bastón usamos” señaló uno de los encargados de la seguridad del recinto.