
El escalofriante hecho sucedió en Tucson, cuando un hombre de 31 años le hizo beber a su hijo agua hirviendo para sacarle un demonio
Un escalofriante hecho sucedió en Tucson, Estados Unidos, cuando un hombre de 31 años, le hizo beber a su hijo agua hirviendo, pues aseguró que este estaba “poseído por un demonio”.
Pablo Martínez cargó a su pequeño hijo debajo de un grifo donde salía agua hirviendo, con la excusa de querer sacarle un demonio. La mamá del menor se percató de que algo ocurría en el baño, pero no logró entrar, fue allí cuando llamó a la Policía.
Cuando los funcionarios llegaron a la casa encontraron al menor tendido en la cama, el padre les dijo que “tenía un demonio”. Sin embargo, al ver la decisión fatal que tomó, el hombre decidió reanimarlo, aunque ya era muy tarde. Los médicos intentaron salvar al menor pero tenía quemaduras en el 15 % de su cuerpo.