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El Gobierno de Honduras y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) suscribieron hoy un convenio orientado a reducir el hambre y la pobreza en el país centroamericano.
El acuerdo fue suscrito por el ministro coordinador general del Gobierno de Honduras, Jorge Ramón Hernández; la vicecanciller hondureña, María del Carmen Nasser, y la representante de la FAO en Tegucigalpa, María Julia Cárdenas.
La FAO dará asistencia a Honduras en materia de seguridad alimentaria, nutricional y agricultura familiar; desarrollo empresarial y financiero rural sostenible con enfoque de género; gestión de recursos naturales y adaptación al cambio climático, y en gestión de riesgo de desastres y resiliencia, indicó esa agencia de la ONU en una declaración pública.
El acuerdo, denominado Marco de Programación de País, concluirá en 2017 y está en “consonancia con los planes e iniciativas” emprendidas por el Gobierno hondureño para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible aprobados por la ONU para el periodo 2015-2030, indicó la representante de la FAO en Tegucigalpa.
Entre estos objetivos destaca la lucha por erradicar el hambre y la pobreza, flagelo que afecta a más del 60 % de los 8,5 millones de habitantes que tiene el país centroamericano.
Y también figuran la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición, el combate del cambio climático, la sustentabilidad de la agricultura, los modos de producción y consumo, el acceso a la energía y la gestión del agua, y los recursos marinos y ecosistemas terrestres.
“En la formulación de este plan hemos trabajado de forma conjunta, identificando con las autoridades gubernamentales las estrategias de intervención diferenciadas conforme a las necesidades de los territorios y las poblaciones que habitan en ellos, con el objetivo de mejorar sus condiciones de vida”, subrayó Cárdenas.
La FAO ejecuta en Honduras diversos proyectos complementarios en seguridad alimentaria nutricional, producción agropecuaria, agroforestal, manejo sostenible recursos naturales, pesca, producción de semillas y cadenas de valor, entre otros programas, según esa organización de la ONU.
Entre 2012 y 2015 la FAO destinó unos 38,5 millones de dólares a la implementación de programas y proyectos orientados a reducir el hambre y la pobreza rural en Honduras, añadió.
El 68 % de esos recursos sirvieron para financiar un programa orientado a reducir la inseguridad alimentaria de 26.000 familias y un 28 % a fortalecer a 6.000 pequeños productores en Honduras, precisó la FAO.
El restante 4 % del dinero se utilizó en la gestión de recursos naturales y la adaptación al cambio climático, y la gestión de riesgos de desastres y resiliencia.