Nury Queipo, madre de David César Boscán Queipo (30), uno de los dos oficiales liquidados por la Policía científica en Gallo Verde, afirma que su hijo no era ladrón de carros
Sentada, con los brazos en la mesa, aferrándose a un pañuelo que le secaba las lágrimas, alegaba que su hijo “no era un ladrón de carros”. El llanto ahogaba a Nury Queipo, madre de David César Boscán Queipo (30), uno de los dos oficiales liquidados por la Policía científica, en un enfrentamiento en el sector Gallo Verde, junto a dos amigos, Júnior de Jesús Pacheco Espina (23) y José David Martínez Rivas (24), un cuarto delincuente Jonathan Colina se encuentra evadido.
“Me quitaron la vida”, repetía Nury, cuando recordaba a su hijo que, desde hace ocho años, fungía como policía. Explicó que él salió luego del almuerzo en el auto Mitsubishi Touring azul eléctrico, placa AH940AA, “me dijo que iba y venía”. Salió con Jesús y José David, pero nunca volvió. A las 7.00 de la noche su nuera la llamó para darle la noticia.
“Iban por alguien más y los mataron a todos”. Entre los familiares se rumora que los detectives buscaban a un joven que iba con ellos, “pero se les escapó y liquidaron a estos”. Explicó que el carro en el que se trasladaban era de ella, mientras mostraba los documentos de propiedad.
“No puedo hablar por los demás pero mi hijo era una gran persona”. Era el mayor de dos hijos, casado y dejó dos hijos.
Policía destituido
Biagio Parisi, secretario de Seguridad y Orden Público, indicó en rueda de prensa, que David Boscán estaba suspendido, por abandono de cargo, desde febrero. “Le suspendimos el salario porque no estaba reportado en ningún centro de coordinación ni en ninguna dependencia policial”. Aseguró que los dos oficiales participaron en un asalto frente a una panadería en la calle 67 en Cecilio Acosta y quedaron grabados por cámaras.
Su madre defendió la reputación del mayor de sus hijos. Explicó a los medios que por problemas en las piernas estaba faltando a sus labores. Estaba tramitando su salida oficial del organismo por su salud.
Versión oficial
La Policía científica aclaró que el carro no estaba solicitado por ningún delito. Los detectives realizaban labores de campo, avistaron el Mitsubishi y uno de los muchachos se bajó y emprendió veloz huida, por lo que iniciaron una persecución a pie hasta la calle 99 del barrio Andrés Eloy Blanco, donde hirieron al oficial y otro delincuente.
Cuando buscaban evidencias, otro tiroteo los sorprendió, en la calle 98 con avenida 55G. Los tres heridos fallecieron al llegar a una clínica. Agregaron que la banda estaba compuesta por 15 delincuentes. “Estaban bien organizados, usaban radios”. Por el caso buscan a Jonathan Colina, otro policía regional. Al parecer, lograron herirlo pero huyó.