Este sábado el Gobierno dio inicio en Caracas a la jornada por la defensa del diálogo y la paz mundial llamada “Todos somos Venezuela”. El evento tendrá una duración de cuatro días y las actividades de llevarán a cabo en dos bloques
Personalidades de 60 países iniciaron este sábado 16 de septiembre en Caracas una jornada de defensa del diálogo y la paz, la soberanía y la democracia llamada “Todos somos Venezuela”, una actividad que tiene como objetivo planificar una agenda de políticas en defensa de los derechos ciudadanos.
La agencia estatal de noticias de Venezuela AVN señaló que el evento tendrá una duración de cuatro días y las actividades se desarrollarán en dos bloques.
Este sábado y domingo “contempla mesas de trabajo para debatir en torno a la defensa de la soberanía y la paz, lucha contra el guerrerismo y el imperialismo, contra el supremacismo racial, discursos de exclusión y de odio, migrantes y ciudadanía universal, contrarrevolución financiera global y derechos de la Tierra”.
El segundo bloque, el 18 y 19 de septiembre, “estipula recorridos por experiencias de organización popular desarrolladas en el país en los últimos 18 años”.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, invitó a sus compatriotas a participar en estas actividades.
“Yo invito a todo el pueblo, al movimiento popular, a los de opinión, a los intelectuales venezolanos, a los sociales, a los políticos, a los partidos del Gran Polo Patriótico para esta jornada mundial”, dijo el jefe de Estado ayer en una alocución desde el palacio presidencial de Miraflores, en la capital venezolana.
Según AVN, en la actividad participarán personalidades internacionalistas, sociólogos, politólogos, periodistas, escritores y documentalistas, entre otros, y se prevé la participación del expresidente de Honduras Manuel Zelaya.
En este encuentro “se diseñará un plan de acción internacional de solidaridad con Venezuela para el período septiembre-diciembre”, destacó la agencia.
El día de cierre se llevará a cabo una movilización “antimperialista para rechazar y deslegitimar la política exterior” que, según Venezuela, “emprende el imperio norteamericano” en su contra.