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El gobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski, consideró que los días miércoles y jueves no laborables para el sector público no deben aplicarse para el Consejo Nacional Electoral (CNE), ni a ningún procedimiento de dicha índole.
Capriles alegó que las nuevas medidas anunciadas son una estrategia del presidente para retrasar el proceso revocatorio en su contra y lo calificó de “tramposo” asegurando que no quiere salida electoral ni pacífica.
El gobernador de Miranda instó al presidente de la República a “no cerrar el camino democrático ni constitucional, porque está jugando con la paciencia del pueblo que tiene todas condiciones dadas para desatar un estallido social”.
Denunció un despliegue policial, en las adyacencias de las zonas destinadas para la recolección de firmas, que pretenden impedir la movilización de los potenciales votantes.
El mandatario mirandino hizo un llamado al Ministro de la Defensa, el General en Jefe Vladimir Padrino López, para que presentara pruebas de las acusaciones de un presunto golpe de estado que estaba siendo planeado por los militantes de la oposición.
Las 101 mil personas inscritas en el exterior no pueden participar en la recolección de firma. En este sentido, Capriles explicó que “El CNE no dispone para realizar un proceso de validación en el exterior”.