Poco después de las 3.00 de la tarde el “María Móvil”, la réplica de La Chinita comenzó a transitar desde la parroquia Santísimo Sacramento, en el sector Las Lomas, en compañía de la imagen de San Juan de Dios
Con fervor y devoción hacia La Chinita, un nutrido grupo de feligreses, por octavo año consecutivo, caminó este domingo junto al Retablo mariano, la imagen de San Andrés y San Antonio, en un recorrido que abarcó tres puntos de Maracaibo.
Poco después de las 3.00 de la tarde el “María Móvil”, la réplica de La Chinita comenzó a transitar desde la parroquia Santísimo Sacramento, en el sector Las Lomas, en compañía de la imagen de San Juan de Dios. La patrona del Zulia recorrió buena parte de la avenida La Limpia hasta el casco central de la ciudad, escoltados por cientos de feligreses, en su mayoría, jóvenes de las diferentes asociaciones parroquiales.
Desde la parroquia Nuestra Señora de Fátima, en la zona norte y a la misma hora, la imagen de San Andrés salió a recorrer las calles, como también sucedió con la imagen de San Antonio de Padua, que partió de la zona sur, específicamente de las instalaciones del Hospital General del Sur.
Los Servidores e Hijas de María, así como los miembros de los diferentes grupos de apostolado como el Grupo Santa Eduviges, participaron en la VIII Caminata Mariana Juvenil Chiquinquireña. “Esta es una experiencia de fe que permite a los jóvenes renovar su devoción. Las caminatas chiquinquireñas representan el movimiento y el avivamiento de la fe en María”, reflexionó Eleuterio Cuevas, párroco de la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá.
Bajo un sol de atardecer y con ánimo, los creyentes marcharon coreando cánticos de alabanzas y oraciones. Cerca de las 7.00 de la noche y a escasos metros del Templo a San Juan de Dios, se encontraron las imágenes con sus tres procesiones, donde la feligresía presente se desbordó de alegría para cerrar con la celebración de la Santa Eucaristía.