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Los aproximadamente 12 mil pensionados y jubilados venezolanos que residen en España y en otros cinco países convocaron a protestas en todas las ciudades donde cuentan con asociaciones, para reclamar las pensiones que llevan 15 meses sin cobrar.
En Zaragoza, noreste del país, la concentración se convocó para las 12.00 de la mañana para exigir el cumplimiento del convenio bilateral que tienen firmado España y Venezuela, según explicó a Efe Liliam Odreman, una de las afectadas.
Con nacionalidad española tras 17 años residiendo en este país, su marido, al igual que el resto de jubilados que viven fuera de Venezuela, dejó de cobrar la pensión en abril de 2016, cuando les ingresaron la parte correspondiente a 2015, por lo que el único ingreso que disponen son los 240 euros (unos 260 dólares) de la pensión contributiva por los nueve años que cotizó en España.
Odreman explicó que algunos de los afectados tienen hasta 90 años y ahora se encuentran en riesgo de exclusión, ya que tampoco pueden recurrir a ayudas sociales al tener reconocida una pensión en Venezuela.
Muchos son españoles nacidos en Venezuela que al jubilarse regresaron a sus raíces y que ahora se les niega su pensión, según informó, porque el presidente Nicolás Maduro les exige regresar para cobrarla.
Piden que el Gobierno de España obligue a Venezuela a cumplir el convenio bilateral puesto que España sí que paga las pensiones a quienes han cotizado en este país y ahora residen en el americano.
Los venezolanos residentes en España ya cuentan con asociaciones en las regiones de Galicia, Andalucía, Asturias, Valencia, Canarias, Madrid, Cataluña y Murcia y la de Aragón está pendiente de aprobación.
Los afectados admiten “el miedo” que sufren ante posibles represalias por parte del Gobierno de Nicolás Maduro.