
Ni la llegada de jugadores como Derrick Rose y Joakim Noah han cambiado la cara al grupo de la Gran Manzana y la relación entre el alero Carmelo Anthony y Phil Jackson, presidente de operaciones del equipo, parece empeorar
Es la novela de la temporada. En los pasillos del Madison Square Garden no existe rumor más fuerte que el que aleja a Carmelo Anthony de los Knicks.
El conjunto neoyorquino es tercero en la división del Atlántico, y undécimo en la Conferencia del Este, lo que apunta a su cuarta campaña consecutiva fuera de la fiesta de los playoffs.
Ni la llegada de jugadores como Derrick Rose y Joakim Noah han cambiado la cara al grupo de la Gran Manzana y la relación entre el alero Carmelo Anthony y Phil Jackson, presidente de operaciones del equipo, parece empeorar.
Los resultados adversos despertaron las críticas en casa y no es secreto que la estrella del equipo y el otrora entrenador no están en sintonía. “Melo” ha dicho en repetidas ocasiones que desea permanecer en Nueva York, pero la gerencia tiene planes de renovar su plantilla, dando de baja a su figura.
La semana pasada se conoció a través de la cadena ESPN que los ejecutivos de los Knicks ofrecieron al jugador a los Cavaliers de Cleveland, pero los de Ohio se negaron ante una operación que involucraba a su ala pívot Kevin Love. Los Clippers de Los Ángeles también mostraron su negativa frente a la oferta.
Ahora, un tercero se asoma para Anthony. De acuerdo con información de Gary Washburn (Boston Globe), los Knicks habrían ofrecido al alero a los Celtics de Boston, cuyo gerente, Danny Ainge, ya se negó a sumarlo a sus filas, pero el entrenador Brad Stevens aprobaría la opción de contar con él en el conjunto verde, dijo una fuente al periodista.
“Melo”, reveló la fuente, aceptaría un movimiento a Massachusetts, anulando en su contrato la cláusula de no cambio. Anthony es uno de tres jugadores de la NBA que actualmente tiene una cláusula de “no cambio”, en la cual puede desaprobar una transacción a un club en la que no esté de acuerdo, los otros dos LeBron James (Cleveland) y Dirk Nowitzky (Dallas). Anthony promedia 22.6 unidades por juego en la presente temporada, con 6.2 rebotes y 3.0 asistencias.