El cementerio Sagrado Corazón de Jesús recibó mas de 700 visitantes y se mantuvo activo hasta su cierre. El Parque Vereda del Lago recibio a los padres en su día para comer, pasear y andar en bicicleta con los mas pequeños de la casa 

En familia, así pasaron el día de los padres los marabinos, sin importar el escenario. Los que desafortunadamente ya no tienen vivo a su padre asistieron a los cementerios para limpiar las tumbas, compartir, prender una vela y ponerle flores. Iniezka Piñeiro, ecónomo del cementerio Sagrado Corazón de Jesús informó que este año se elevó la afluencia de visitantes. 

Desde las 7.00 de la mañana que abrió el campo santo hasta el medio día más de 700 personas ya habían visitado el cementerio. Sin embargo el tema de la seguridad sigue preocupando tanto a las autoridades como a los familiares. “Polimaracaibo solo nos prestó el apoyo por hoy con cuatro oficiales que están en la avenida La Limpia, pero no adentro del cementerio”.  Piñeiro recalcó que no se presentaron incidentes y agradeció a los visitantes la atender sus tumbas. 

Los sepultureros aprovecharon a los que tenían desatendido los osarios de sus familiares para ofrecerles “una limpiadita”. Desde mil hasta cinco mil bolívares cobraron los hombres que caminan el cementerio con pala, machete y un balde en mano para recoger los desechos. También hubo quienes se quejaron del “descuido” que reina en el Corazón de Jesús pidieron limpieza y vigilancia. “Esto esta desastroso. No sé cómo dejan poner esto así. No hay limpieza ni seguridad, ahorita atracaron un señor y le quitaron el carro para allá atrás y la vez pasada que vine iban a violar a una muchacha. Yo venía todos los domingos pero ahora solo en fechas especiales porque no se aguanta esto”, dijo Nancy Soto familiar. 

Los vendedores de flores se quedaron “asombrados” por la cantidad de gente que asistió al cementerio. Lolimar Tapia, vendedora dijo: “Yo no me esperaba tanta gente hoy, gracias a Dios nos ha ido bien y las ventas subieron más del 30 por ciento”. Desde tres mil bolívares hasta ocho mil pagaron los hijos por un ramo de flores para su difunto padre, mientras que el que quería prenderle un velón tuvo que pagar tres mil bolívares. Erika Cabrera, vendió dos tipos de arreglos, los normales y los especiales que incluían una botella de ron por 27 mil bolívares. “El día de las madres fue mejor, hoy esta floja la venta”. 

En familia

El parque Vereda del Lago de Maracaibo recibió a los padres marabinos que prefirieron compartir con sus hijos. Santiago Peña se tomó el día para viajar “y pasar un rato diferente”. Vino con su esposa Roxana Sánchez desde La Villa del Rosario a celebrar su día. Mientras descansaba en la grama con sus dos hijos en brazos dijo: “me regalaron una gorra y un reloj, pero lo mejor el mejor regalo es tenerlos a ellos”. 

Jorge Villamizar prefirió dar un paseo en bicicleta con sus dos chamos que le regalaron dos tarjetas echas en el colegio. “Esos son los detalles que derriten a uno”. Sin embargo no desaprovechó la oportunidad para alertar sobre el descuido en algunas áreas del parque. Douglas Pozo pasó a otra etapa, dijo estar gozoso de celebrar su día con sus 17 nietos. Mientras compartían un helado y reventaban burbujas de jabón, el orgulloso abuelo reveló: “Ha sido un buen día”. 

Este día del padre transcurrió en calma. Unos visitaron lo visitaron en su última morada y entre lágrimas o resignación pidieron por el descanso de su alma, mientras que otros, sin mucho alboroto hicieron lo posible por pasar un rato agradable con el ser que los engendró. Aunque la mayoría no recibió regalo por la situación económica, pasar un rato en familia fue suficiente para celebrar a papá. 

Felices en silencio

Carlos Colmenares y Shiara su esposa llegaron a la vereda desde muy temprano para compartir con su hija. Ambos son sordo mudos. La pequeña dijo que estar con “papi Carlos es maravillosos”. La pareja mostro con gestos su felicidad mientras posaban para una foto familiar.