Es lógico que haya diferencias y que surjan diversas aspiraciones para la conformación de la junta directiva de la Asamblea. Saber dirimirlas es lo que permitirá que salgamos fortalecidos de esta primera prueba
Hemos dicho en varias oportunidades que luego del 6-D, quienes integramos la mayoría calificada de la AN, tenemos la obligación de no equivocarnos. Nuestra Venezuela se ha generado muchas expectativas acerca del trabajo y los resultados que podemos lograr con esa mayoría en el Parlamento nacional. Por tanto pienso que todas las decisiones que se tomen deben estar signadas por tener reglas claras de juego que preserven la unidad y por decisiones que atiendan las aspiraciones de cambio del pueblo venezolano.
Es lógico que haya diferencias y que surjan diversas aspiraciones para la conformación de la junta directiva de la Asamblea. Saber dirimirlas es lo que permitirá que salgamos fortalecidos de esta primera prueba.
¿Qué ha propuesto Primero Justicia? Nosotros hemos propuesto que la presidencia y directiva de la Asamblea sea rotativa, lo que quiere decir que cinco partidos diferentes deben ejercer la presidencia del Parlamento nacional y todos los partidos deben tener, durante los cinco años, al menos una representación en la directiva. ¿Qué partido comienza? Consideramos que para dilucidar esto debemos tener un criterio objetivo y ese criterio objetivo es el número de diputados con los que cuenta cada partido integrante de la MUD. Así se ha hecho en varias instancias legislativas. En ese caso, el primer año, la presidencia correspondería a Primero Justicia, luego a Acción Democrática, a Un Nuevo Tiempo, a Voluntad Popular y el quinto año a los partidos minoritarios. Pienso que esta propuesta es equilibrada y nos representa a todos.
¿Qué no me parece? Que dos o más partidos se pongan de acuerdo e intenten imponer una mayoría dentro de la fracción parlamentaria de la MUD, porque eso terminaría siendo una especie de sindicalización que pondría las decisiones en un grupo por encima y sometería a la totalidad de los diputados a acatar directrices de ese grupo. Eso sería un pésimo precedente que acabaría con la solidaridad, la sana discusión y el reconocimiento de todos como iguales.
Tenemos mucho por hacer. Así que es necesario que dilucidemos el asunto de la Junta Directiva y sigamos trabajando para que tengamos un 5 de enero sin tropiezos y con esperanzas, así como para preparar ese proceso legislativo y de control que Venezuela está esperando y por el que votó masivamente. Pero para lograr eso, debemos asumir reglas claras de juego, debemos respetarnos y querernos en unidad y debemos ser consecuentes con el anhelo de cambio que tiene el pueblo venezolano.
diciembre 7, 2024
