Según
El Gobierno nacional debe decirle la verdad al pueblo venezolano y no seguir con las mentiras de que las causas principales de la crisis son: “la guerra económica” y la “inflación inducida” implementadas por el imperio norteamericano y la oposición venezolana, cuando la realidad es que el verdadero responsable directo de esta crisis es el mismo Gobierno y sus políticas económicas, acompañadas de un irrespeto reiterado a la Constitución en el manejo de las finanzas públicas.
Para fundamentar lo antes afirmado, debemos comenzar por decir que una gestión de Gobierno se mide por sus resultados. Según confesión del presidente Maduro, los ingresos recibidos por el modelo en el poder durante 15 años, fueron de un billón 182 mil millones de dólares. Hay que hacer un gran esfuerzo para comprender la magnitud de esa inmensa fortuna que ha administrado el llamado Socialismo del siglo XXI, empezando por recordar que un billón se escribe con un 1 y doce (12) ceros, y que estamos hablando de dólares.
La responsabilidad del Gobierno es más grave aun si recordamos que antes de tomar el poder la llamada “revolución”, el 4 de noviembre de 1988, a través del Decreto N° 2.991, y como consecuencia de un consenso nacional, el gobierno de Rafael Caldera por una Ley Habilitante, acordó crear el Fondo de Inversión para la estabilización macroeconómica, el cual establecía que entre los ingresos que formarían parte de ese fondo estaban los ingresos petroleros que excedieran el promedio de ingresos por ese concepto durante los cinco (5) años anteriores.
Imagínense ustedes la gran cantidad de ahorros que hubiésemos guardado durante tantos años en que los precios del barril de petróleo estuvieron en 100 o más dólares, superando los promedios de los cinco años anteriores. Sin embargo, a pesar de que la Asamblea Constituyente compartió la necesidad de protegernos ante el carácter cíclico de los precios petroleros, y en el Artículo 321 de la Constitución estableció el mandato de establecer el fondo de estabilización, el oficialismo representado hoy por el presidente Maduro, maniobró con diferentes modificaciones a la Ley de ese fondo para no cumplir con el mandato constitucional de ahorrar en épocas de precios altos; no ahorramos. La gran emergencia nacional es la rectificación.