
Una
Más y más kilométricos jonrones se disparan a diario en los distintos estadios de las Grandes Ligas. Una tendencia que se ha estado incrementando llamativamente en los últimos años en el mejor béisbol del mundo.
El incremento de vuelacercas en las Mayores está alcanzo un punto en que los disparados en la presente temporada da un promedio de 1.24 por juego, una cifra que es incluso mayor que a la del récord histórico (1.17) establecido en el año 2.000, en plena era de los esteroides con Mark McGwire, Sammy Sosa y Barry Bonds como principales exponentes.
En la actualidad, y en medio de un béisbol “limpio” de sustancias para mejorar el rendimiento, se siguen elevando los índices jonroneros. Después que en abril impusieron un promedio de 1.17 jonrones por juego, en mayo los bateadores incrementaron la cifra 1.26, y en el transcurso de junio la están aumentando aún más con 1.33 cuadrangulares por encuentro.
Una nueva camada de peloteros está emergiendo como los principales estandartes en los departamentos de jonrones en las Grandes Ligas. Aaron Judge, el novato sensación de los Yankees de Nueva York, aparece como el líder en jonrones (22), no solo aumentando los registros de bambinazos, sino maravillando a los espectadores con sus kilómetros recorridos.
De hecho, Judge protagonizó en Yankee Stadium un batazo de 496 pies que de momento es el más largo de la presente temporada. Junto a Judge aparecen figuras como Ryan Zimmerman (19), Giancarlo Stanton (17) que lideran una generación poderosa, que no solo genera cantidad de cuadrangulares, sino dantescos tablazos que a por otro lado generan algunas interrogantes. ¿Sí se abolió la era de los esteroides?, ¿a qué se debe que se disparen tantos jonrones?, ¿es la pelota?, ¿son los ajustes de los bateadores?, ¿qué está pasando?
¿Es la pelota?
De acuerdo al portal Fan Graphs, una investigación de MLB -y otros entes- examinó la pelota oficial de las Grandes Ligas, marca Rawlings, no solo debido a la enorme cantidad de jonrones disparados desde 2015 hasta el presente, sino por sus kilométricos recorridos. Sin embargo, la investigación no arrojó nada anormal que indique que la bola de cinco pulgadas y 108 puntos sea la causante del desproporcionado número de vuelacercas.
Pero con la era de los esteroides atrás, lo que deja entender que el béisbol moderno de las Mayores fue “limpiado”, respecto al uso de sustancias para mejorar el rendimiento, entonces ¿cómo se explica el desproporcionado aumento de los jonrones?
Hay más rectas y ponches
La explicación está relacionada a diversos factores, pues también se incrementó la cifra de ponches, el uso de la recta y los ajustes de los bateadores. ¿Empezamos con los ponches? Año tras año la los registros de bateadores fusilados es mayor y mayor.
Casi todo apunta a la bola rápida, ya que cada vez más se impone como el lanzamiento más utilizado en las Grandes Ligas. Según Fan Graphs, en 2017 el uso de la recta es de 93 por ciento, cuando por ejemplo en 2010 era del 90 por ciento.
Los lanzadores recurren con más frecuencia a la recta lo que produce mayor cantidad de outs por la vía del strikeout, pero al conectarla con fuerza también es propensa a salir volando de los parques de béisbol.
El béisbol de ajustes
Obviamente, los ajustes de los bateadores también están teniendo su impacto. De hecho, cada vez son más los cuadrangulares producidos con envíos bajos. De acuerdo al Stats Cast de MLB, se han incrementado los bambinazos con pitcheos bajos debido al ángulo de swing de los bateadores está más alto. Más al estilo upper cut, es decir, de abajo hacia arriba.
Ciertamente en el análisis también influyen elementos como la preparación física de los atletas que cada vez es más especializada con tanta velocidad y tanta fuerza.
Más allá de todo, la realidad es que el béisbol moderno nos está marcado una tendencia que cada que se agudiza más. Atrás parecen quedar los tiempos del béisbol de la pelota pequeña, pues conforme aumentan los jonrones, cada vez son menos los toques de bola y los robos de base. El béisbol evoluciona y nos trae esta versión moderna, que con un entorno más “limpio” nos permite contemplar más batazos de vuelta completa.
Haga click acá para agrandar la imagen