De corredor de seguros a artista plástico. Desde hace 28 años y en su tiempo libre Hernando Tamayo crea obras que son para toda la vida. Son obras de gran dimensión, tan grande como su pasión, que ve en cada pieza virgen una nueva oportunidad para recrear la visión del arte en la talla de la madera
Todo comenzó en un día de pesca cuando Tamayo observó las formas que hace agua a través del tiempo y se dio cuenta que esas formas se podrían llevar a la realidad a través del esfuerzo humano. “La obra está en el trozo de madera, solo hay que visualizarla y ver qué puede salir de ahí. Sin embargo, cuando me inicié, yo agujereaba el tronco por todos lados para darle forma”.
Para Hernando Tamayo el proceso de creación de la obra debe ser paso a paso. “Primero se comienza con la búsqueda de la madera, luego viene la observación para ver qué obra puede salir del trozo de madera que se consiga. A veces no sale en el momento pero al crearla es muy satisfactorio porque es el cumplimiento de un gran esfuerzo como lo es llevar una obra a buen término, de verla terminada y aportarlo a la sociedad. Se convierten en obras muy valiosas que salen de la nada”.
El artista plástico con cuatro exposiciones en su haber comenta que no pudo adaptarse a los volúmenes pequeños, “he ido evolucionando” y su resultado final son obras de grandes dimensiones, Esculturas que puede disfrutar en la Sala Alternativa del Centro de Arte de Maracaibo Lía Bermúdez (CAM-LB), frente a frente a la exposición de Laura Díaz, su esposa, compañera de vida y proyectos, quien muy emocionada dijo: “Esto es un reconocimiento a nuestro amor. Son dos personas que están unidas en un mismo proceso y proyecto de vida, abriendo exposición el mismo día en el mes del artista plástico”.
El mejor costurero de ropa flamenca
Un artista es sinónimo de versatilidad. Y Hernando Tamayo no escapa de esto. Laura Díaz, directora de la escuela y compañía de danza flamenca La Giralda, comenta cómo comenzó Hernando en la costura.
“Cuando La Giralda estaba iniciando yo busqué unas costureras por El Manzanillo para que me hicieran los trajes. El trabajo no lo estaban haciendo y las niñas se dieron cuenta. Eso le impactó muchísimo a nuestra hija Paola, quien llegó llorando a la casa. Y Hernando le dijo una frase profética: ´Paola quédate tranquila, yo te voy a ayudar´. Él ahora es el mejor costurero de ropa flamenca del país”.
Y fue así como Hernando Tamayo comenzó la búsqueda de quien le pudiera indicar el camino en la confección “y de diez, encontré a una italiana llamada Franchesca Diana. Traiga papel, lápiz y cuaderno, me dijo. Con ella empecé a trabajar el patronaje, cómo se toman las medidas, cómo se hace un patrón y de dónde sale. Luego fui a Caracas para ver cómo se hacía una bata de cola y aprendí. También hice muchos cursos en España, estuve dos años y además, confeccioné para las mejores tiendas de Málaga. Hasta vestí a una reina de la feria. La gente no quería que me viniera (risas). Todo lo que sé también lo he enseñado a varias personas y lo hacen muy bien”.
enero 25, 2025 - 5:50 pm
