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Los criminales se desplazan en automóviles de lujo y atacan a las víctimas a plena luz del día. Las bandas del “Chico Matica”, el “Chocolate”, los “Mansantos”, “Mequeka”, el “Cecita”, el “Chicho Baquiro”, el “Chicho Mata Caballo”, el “Bulldog” y el “Chacaruo” tienen sus objetivos claros: despojar a punta de cañón a los conductores de las camionetas 4Runner, Explorer Eddie Bauer, TrailBlazer y camiones Cheyenne y Tritón que circulan por la carretera Machiques de Perijá. La Policía recibe al menos tres denuncias diarias.
Aunque son nueve bandas las que azotan la vía que comunica Maracaibo, San Francisco, La Cañada de Urdaneta, Jesús Enrique Lossada, Rosario de Perijá y Machiques, todas tienen el mismo modus operandi: Al fijar su objetivo, los ladrones aceleran y se adelantan para obligar a su víctima a disminuir la velocidad, mientras el cómplice se desplaza del lado del piloto, baja el vidrio y desde el interior apunta al chofer. “Los amenazan desde adentro para que los transeúntes no se percaten del asalto”, detalló un oficial.
Al conductor lo sacan de la vía, lo abandonan en una zona desolada y luego comienzan a cobrar. Antes de 24 horas deben hacer el pago, de lo contrario, el camión o la camioneta desaparecen. Los delincuentes piden hasta un millón de bolívares de rescate. El 90 por ciento de las víctimas negocia y paga.
“Me amenazaban con matarme si no me detenía”, comentó el técnico de zootecnia al recordar el día en que las bandas lo atacaron. Querían su camión 350 blanco. Tres atracadores lo siguieron en dos camionetas, lo acorralaron y lo obligaron a detenerse en la vía a Machiques.
Apenas se estacionó el profesional, uno de los ladrones le abrió la puerta del piloto, lo haló por la camisa y lo sacó de un solo tirón. “Los brazos me los torcieron hacia atrás y a empujones me subieron a su Eddie Bauer”. Lo obligaron a cerrar los ojos y a acomodar la cabeza sobre sus piernas.
“Me llevaban apuntado con un revólver y me decían una y otra vez: ‘No vais a abrir los ojos. No me miréis, no me veáis’. Así me tuvieron las tres horas que me ruletearon”.
Arrecian
El experto en zootecnia no ha sido la única víctima del psicoterror de las bandas. Los residentes del sector El Bocachico, en el kilómetro 18 de la vía a Perijá, contaron que cada día atacan al menos tres conductores en esa carretera.
Los interceptan entre las 6.00 y 7.00 de la mañana. “Es la hora en la que la gente se detiene a desayunar en los puestos de comida de la vía”, expresó un habitante. A otros los acorralan cuando frenan en los reductores de velocidad.
“En tres meses robaron al menos a 200 personas y esta cifra es alarmante. Durante mayo y junio las ventas en las licorerías y restaurantes bajaron”, indicó el dueño de un depósito que se encuentra en la carretera, quien aseguró que los vándalos a veces asaltan en Maracaibo y luego dejan botadas a sus víctimas desnudas, en Palito Blanco con intercepción Perijá.
En la mira
La Policía ya tiene identificada a las bandas y las sigue de cerca. Los criminales se movilizan en vehículos Silverado, Cheyenne, Ford Fiesta, camionetas Jeep Cherokee, Terios, Ford Explorer Eddie Bauer y una Chevrolet TrailBlazer. “Varían sus carros para que no los descubran”, precisó un policía del punto de control del kilómetro 16.
La comunidad denunció que los delincuentes no conviven en las adyacencias de la carretera. “Esos delincuentes emigraron de La Concepción, Maracaibo y a veces del municpio La Cañada de Urdaneta”.
Los investigadores de la División de Robo y Hurto de vehículo de la Policía científica apertura entre 12 y 15 averiguaciones de robos de vehículos en la vía que conduce a Machiques. Habrá resultados con las investigaciones, pero se necesita de la colaboración de los vecinos y las víctimas.