Acceder hoy a censarse es aceptar que el día de mañana impongan otro censo, luego otro. Y cada censo representa un nuevo control a tus derechos ciudadanos y humanos. No te censes, no permitas que te impongan nuevos controles a tus derechos constitucionales
Los venezolanos no necesitamos un carnet para llevar nuestra patria, la patria se lleva por dentro, es esa venezolanidad que hace que nuestro corazón palpite de emoción al escuchar el Himno nacional, que nos conmueve al ver ondear nuestra bandera, es lo que nos hace extrañarla y amarla. La patria es nuestro legado histórico.
Es la lucha que emprendieron nuestros libertadores, por la cual derramaron su sangre, para que los ciudadanos de hoy tuviéramos cada vez más derechos y más libertades. Pretender hoy reducirla a un carnet, más que una ofensa, es señal de la degradación de nuestra nación.
Esa patria nuestra, para nada, es esta patria secuestrada por el régimen corrupto de Nicolás Maduro, que lo único de lo que se ha ocupado, aparte de llenar sus bolsillos, es de cercenarle cada vez más los derechos a los venezolanos.
Por eso, no necesitamos otro requisito ni carnet para ser tratados como ciudadanos venezolanos con plenos derechos, sin distinciones ni exclusiones.
Y este asunto de censarse, que es lo mismo a someterse de forma condicionada al PSUV, para que con este chantaje te entreguen un “Carnet de su Patria”, y con ello presuntamente gozar de las prerrogativas que ya como ciudadano venezolano te has ganado, de verdad, no tiene razón de ser ni justificación.
Lo que hay detrás de este “Carnet de su Patria” es una estrategia de manipulación y sometimiento político, es que tú como ciudadano vivas de rodillas, rogando migajas al dictador, es la forma más vil para seguir degradando la dignidad de los venezolanos.
Es además, la fórmula para intentar tapar la devastación que este régimen de ladrones ha provocado en PDVSA. Con su sed insaciable de dinero convirtieron al país, con las mayores reservas probadas de petróleo del mundo, en una nación con la hiperinflación más alta del continente, y una de las economías más depauperadas del mundo.
Corrupción que desde hace más de 10 años, nos hemos ocupado de denunciar. Señalamos en su oportunidad al general Izquierdo Torres, por ser el responsable y cómplice de la fuga de 70 millones de litros de gasolina al mes, por uno de los puntos fronterizos de Venezuela con Colombia, develamos el gran negocio que se estableció alrededor del chip de la gasolina en el estado Zulia, cuyos benefactores fueron Francisco Arias Cárdenas, en sociedad con su hijo, acusamos a la alta gerencia de PDVSA-Occidente de formar parte de las mafias de contrabando de gasolina que desangraron a la nación, y hoy, cuando todos tienen sus bolsillos llenos y las reservas saqueadas, pretenden hacer pagar a los ciudadanos las consecuencias.
El “Carnet de su Patria” es amigo, la consolidación de la segregación y el apartheid político en Venezuela, al final del día es eso, una patria de ellos, llena de corrupción, miseria, odio, rencores, migajas y muerte, donde unos pocos se llenan sus bolsillos y sus barrigas, mientras que una inmensa mayoría ruega por un pedazo de pan; y la otra patria, la de los rebeldes valientes, la de los que se atreven a reclamar por el desastre y el caos en el que han hundido a Venezuela, la que se lleva por dentro, esa es la verdadera patria.
Esa es la patria que está en nuestra Constitución y el corazón, la patria con carnet, no existe. Acceder hoy a censarse es aceptar que el día de mañana impongan otro censo, luego otro. Y cada censo representa un nuevo control a tus derechos ciudadanos y humanos. No te censes, no permitas que te impongan nuevos controles a tus derechos constitucionales.
Este régimen corrupto lleva más de 20 años estafando a los venezolanos con censos y controles, y hasta la fecha, aún no ha aportado ninguna solución a la crisis. Es hora de parar a estas sanguijuelas que viven y se mantienen de la crisis de los venezolanos.
Vamos a rebelarnos para defender nuestra verdadera patria. Dile no al censo de los corruptos. Recuerda que la patria se lleva por dentro, no necesitas un carnet para sentirla.