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Tras 49 días detenidos en la sede del Grupo de Antiextorsión y Secuestro (Gaes), liberaron el miércoles pasado a los trabajadores de Termozulia III acusados por sabotaje, luego de una fuga de 13 mil litros de aceite 40 litros de agua desmineralizada. Salieron de su encierro bajo régimen de presentación de seis meses de duración.
El 18 de mayo Luis Motta Domínguez, ministro para la Energía Eléctrica denunció a través de su cuenta en Twitter el acto que habría afectado 150 megavatios térmicos de la región. El presidente Nicolás Maduro también mencionó el caso de los 10 empleados durante una alocución culpándolos de sabotaje y asegurando que les imputarían cargos por terrorismo, tomando en cuenta la contingencia eléctrica que vive el país.
Durante las investigaciones, cinco de los trabajadores salieron en libertad, pero Juan Moreno, Alexander Sánchez, Omar Méndez, José García y Lendris Cabello, quienes estaban de guardia y se encargaban de las áreas afectadas permanecieron presos.
Paro en discusión
Los empleados de la Corporación Eléctrica Nacional del estado Zulia tienen miedo. En la región las amenazas perciben más cercanas y contundentes, ocasionando una división en una manifestación que se esparce en el país. A pesar de que reportan que 80 por ciento de los trabajadores de Corpoelec acatan un paro, solo 30 por ciento de los zulianos se atreven a faltar a sus oficinas.
“Aquí la campaña de amedrentamiento ha sido tan fuerte que lo trabajadores no se han querido pegar al paro por amenazas, porque tienen miedo de ir presos o ser despedidos”, asegura Álvaro Blanco, líder del Sindicato de Trabajadores Socialistas de la Corporación Eléctrica del Estado Zulia (Sisbotieesez). Afirma que solo el Sindicato Unitario de Trabajadores de la Industria Eléctrica Similares y Conexos del Estado Zulia (Sutiescez) mantiene su negativa de acatar el llamado a la protesta propuesta por Fetraelec hace ocho días.
“No estamos de acuerdo con la forma en la que se llamó el paro. No hay garantía de estabilidad laboral, no fue admitido el pliego conflictivo por la Inspectoría del Trabajo y no queremos que pase como PDVSA”, afirma Wilfredo Olano coordinador general de Sutiescez. Explica que trabajan en el trámite de reconocimiento por parte del organismo para abandonar su estatus de condición conciliatoria.