
Los
La vida delictiva de Adermo Jesús Querales Morales (32), alias el “Memo” culminó en la urbanización El Soler. Se enfrentó a una comisión de la Policía municipal de San Francisco (Polisur) junto a su pareja, Kenia Paola Soto Díaz (24). El “Memo” estaba solicitado por el homicidio de Carlos Uzcátegui Ríos (37), exfuncionario de Polisur.
Durante tres meses le siguieron los pasos. En una vivienda con cerca de ciclón del lote 1B, en la calle 202 con avenida 47H lo acorralaron a las 10.30 de la mañana de ayer. Oficiales de la Dirección de Inteligencia procedieron a capturarlo, pero se negó.
Desde el interior de la casa, la pareja inició un enfrentamiento disparando a los funcionarios con un revólver niquelado, calibre 38 y una pistola. En la balacera los proyectiles hirieron a los delincuentes. Ambos fueron trasladados en la parte de atrás de una camioneta hasta el Centro de Diagnóstico Integral Los Cortijos. Allí los médicos de turno certificaron el deceso.
En la fachada de la casa beige podían observarse más de 16 impactos de bala. Una prima de Soto llegó a la escena para preguntar si estaba muerta, se acercó a un oficial y este le respondió, “Si, búscala en la morgue”.
Los curiosos se acercaron a la calle, comentaban que el “Memo” tenía poco tiempo viviendo allí. “Lo veíamos muy poco, solo cuando salía a la tienda” recordó una vecina.
La Policía científica recolectó las evidencias, entre ellas las dos armas de fuego. Osman Cardazo, comisionado presidencial de Polisur, informó que Querales era el líder de una banda criminal dedicada al sicariato.
Según Exp.00708 y Exp.00873 estaba solicitado por el homicidio de Isaac Ricardo Lopez, asesinado en el sector Bolivariano en mayo de 2015. El asesinato de Wilfredo Jose Zabaleta García en el barrio el Manzanillo.
Asesino de policías
El “Meme” estaba solicitado por el asesinato del exfuncionario de la Policía municipal de San Francisco, Carlos Luis Uzcátegui Ríos (37). La víctima se desplazaba el 28 de agosto de 2015 en un Renault Symbol azul, placa VCA73T, por la calle 10 del sector Unión, municipio San Francisco. Su padre, Arnoldo José García resultó herido.
El cuerpo del oficial quedó en el puesto del copiloto. El vehículo tenía 13 impactos de bala; seis en el vidrio del acompañante, seis en el vidrio delantero y uno en la capota. Los detectives manejaron el crimen como una venganza.