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En el sector La Ensenada retumbaron el sonido de los disparos, la noche del pasado sábado. Sicarios en moto asesinaron a Deivis José Parra Hernández, de 28 años, en la calle 3 con avenida 1 del lugar. La Policía científica evalúa las evidencias, pero presumen que se trató de una venganza.
Tras la balacera los vecinos asustados salieron al frente de sus casas y se toparon con el cadáver de Parra, rodeado de un charco de su propia sangre. Sus homicidas ya habían huído con rumbo desconocido. Minutos después del homicidio las autoridades de la policía municipal y regional se traladaron al lugar y resguardaron la escena, hasta que los detectives de la Policía científica llegaron a levantar el cuerpo.
Los oficiales y residentes recordaron que el cañadero murió desangrado frente a su casa, cerca de la empresa Cemarca. Sus verdugos lo sorprendieron a las 11.26 de la noche. Antes de que las patrullas se marcharan los habitantes de la zona se dispersaron y se refugiaron en sus hogares.
La Policía científica recabó los casquillos de las balas que utilizaron los señalados y se entrevistaron con los cercanos para tratar de identificar a los responsables o las características de la motocicleta. Los detectives manejan como móvil del homicidio, la venganza.
7 detonaciones escucharon los vecinos de la víctima