Al francés lo presentó en el Santiago Bernabéu, Florentino Pérez, presidente del club blanco, que lo elogió y explicó lo difícil que fue tomar la decisión de reemplazar a Benítez
Cuando en junio del año pasado Rafael Benítez firmó un contrato para dirigir al Real Madrid por dos años, la reacción general fue negativa. Quizás fue por el estilo defensivo del entrenador español, o por la falta de empatía que genera. Podría ser por sus mediocres resultados en los últimos años con sus clubes.
Lo que es cierto es que durante los tres meses que Benítez tuvo las riendas del equipo merengue, fue una sombra, motivo por el que Florentino Pérez, presidente del club, junto con su directiva, destituyeron a "Rafa" y anunciaron como su reemplazo a Zinedine Zidane, que estará con el conjunto hasta el final de temporada.
El francés llega al banco del equipo 10 veces campeón de Europa luego de acompañar como asistente técnico a Carlo Ancelotti y después de entrenar por temporada y media al Real Madrid Castilla, al que no pudo ascender a la Segunda División.
En el Santiago Bernabéu, Pérez hizo el anuncio. “Hemos tomado una difícil decisión, como es resolver el contrato de Rafael Benítez del primer equipo. Estamos ante un magnífico profesional y una gran persona. Quiero agradecerle su trabajo estos meses”.
Seguidamente, el directivo presentó al nuevo director técnico, a quien elogió a más no poder. “La junta directiva ha decidido nombrar entrenador del primer equipo a Zinedine Zidane. Es una de las figuras más grandes de la historia del fútbol, sabe lo que es estar al frente de la plantilla del Real Madrid y sabe lo duro que es estar en este banquillo. Sabe lo que es estar con estos jugadores, los dirigió como segundo hasta la décima. Para él lo imposible no existe”.
El momento de Zidane
Zidane, ha prometido "meter todo el corazón" y resaltó que deben "intentar hacerlo lo mejor posible para que este equipo a final de año gane algo". Esa es la meta que se ha fijado el francés apenas al asumir las riendas del cuadro blanco.
“Quiero agradecerle a nuestro 'presi' por darme la oportunidad de entrenar a este equipo. Tenemos al mejor club del mundo y a la mejor afición del mundo".
El francés tendrá el privilegio de entrenar a uno de los equipos más importantes del mundo, pero por su poca experiencia y por el momento que llega a la institución, podría ser un riesgo que significaría empezar con el pie izquierdo su carrera como director técnico. Hoy será el primer entrenamiento de la plantilla con "Zizou", quien se estrenará el próximo sábado ante el Deportivo La Coruña.
El "Mago" asume el desafío para aportar desde el banquillo, las ídeas para sacar al Madrid del mal momento y de darle luces a sus jugadores de plasmar en la cancha el juego con el que destelló en su etapa de jugador.
Zidane toma las riendas un día después del empate 2-2 en Valencia que hizo más profunda la crisis que inició con la embarazosa derrota en casa por 4-0 ante el Barcelona, en noviembre.
El Madrid ganó siete de los nueve partidos desde la desmoralizante derrota, pero los aficionados demandaron la salida de Benítez.
Real Madrid es tercero en la liga española, cuatro puntos detrás del líder Atlético de Madrid y a dos del Barcelona.
El equipo de trabajo de Zidane estará formado por David Bettoni, como asistente técnico; José Parrales, preparador físico y por Roberto Vázquez, entrenador de porteros.
La rápida debacle
El sueño de Benítez siempre fue entrenar al Real Madrid. De hecho, el español empezó su carrera como director técnico del Castilla en 1993. Veintidós años después, finalmente tuvo su oportunidad de entrenar al primer equipo, aunque no se le dieron las cosas como él hubiese querido.
En las primeras fechas de la liga española, el equipo no lució, pero sacaba los resultados, incluso lideró la tabla hasta la fecha 11, en la que perdió en el estadio Sánchez-Pizjuán con el Sevilla (3-2) en una increíble exhibición del ucraniano Yevhen Konoplyanka.
Después llegó el golpe más duro de la temporada. La derrota ante el Barcelona. No solo fue la goleada en el Bernabéu, sino el cómo, la superioridad impuesta por el equipo culé provocó que la afición merengue sacara los pañuelos blancos, pidiendo la salida de Florentino y Benítez.
Le siguió el escándalo en Copa del Rey con el Cádiz, en el que por una alineación indebida la casa blanca quedó fuera de la competición. Problemas con jugadores claves como Karim Benzema y James Rodríguez, dejaban muy mal parado al entrenador.
Benítez nunca pudo manejar el vestuario ni rellenar al espacio que dejó Carlo Ancelotti, quien le dio la tan preciada décima Champions al Madrid.