Las costas venezolanas se encuentran en estado de alarma desde el pasado lunes, por un frente frío que se traduce como fuerte temporal con vientos ciclónicos y anticiclónicos. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología prevé que la situación se calmará para el fin de semana
El mar de fondo o leva es un peligroso fenómeno que produce largas y fuertes olas de ciclo uniforme, que no rompen en alta mar y pueden profundizarse en la costa.
Las costas y playas del litoral central venezolano son azotadas por fuertes lluvias y olas de hasta tres metros de altura, lo que provocó severas inundaciones en La Guaira, capital del norteño estado Vargas, a pocos kilómetros de Caracas.
La Organización Nacional de Salvamento y Seguridad Marítima de los Espacios Acuáticos de Venezuela (ONSA) alertó del estado de alerta por progresivo aumento de oleaje en Vargas, Puerto Cabello y La Vela. Esperan que la mayor intensidad se presente durante el fin de semana y se mantenga durante siete días más.
El ministro de Interior, Justicia y Paz, Néstor Reverol, indicó que los organismos de seguridad y emergencias monitorean el territorio nacional y afirmó que el fenómeno se mantendrá hasta finales de la semana.
Jorge Luis García Carneiro, gobernador de Vargas, informó que las autoridades locales realizan recorridos por la franja costera del estado con el fin de evaluar los daños causados por el temporal, e hizo un llamado a la calma y la prudencia, informó la prensa local.
Entre tanto, en la localidad de Puerto Cabello, Carabobo, donde se ubica la segunda instalación portuaria del país, se registraron marejadas e inundaciones y las autoridades prohibieron el tránsito de embarcaciones. En Anzoátegui 24 familias que resultaron afectadas por el fuerte oleaje en la localidad de Lecherías.